Marco Asensio era una de las grandes promesas del futbol mundial. Tuvo una irrupción bestial en el Real Madrid, y para muchos estaba destinado a convertirse en uno de los mejores jugadores del planeta. Por lo tanto, no es de extrañar que algunos de los equipos más importantes del continente se fijaran en él, y trataran de cerrar su fichaje. Pero tanto Florentino Pérez como el internacional español se dedicaron a rechazar todas las ofertas que recibieron.
En especial, una del Liverpool que era muy tentadora, pues en ‘Defensa Central’ señalan que llegaron a poner sobre la mesa 180 millones de euros. Jürgen Klopp estaba convencido acerca de su contratación, y no tenía ningún tipo de duda de que era una inversión que merecía la pena hacer. Pero son tiempos que quedan muy atrás, pues ahora es completamente imposible que algún equipo esté dispuesto a pagar esa cantidad. Ni siquiera, la mitad.
En el Santiago Bernabéu se conformarían con recibir entre 30 y 40 ‘kilos’ para dejar marchar al ex del Real Club Deportivo Mallorca y del Real Club Deportivo Espanyol. De lo contrario, corren el riesgo de que se vaya completamente gratis, al finalizar contrato en 2023, y no haber un acuerdo para renovar. Para Carlo Ancelotti es una pieza valiosa en la rotación, pero no tiene opciones de ser titular, y eso es lo que provoca que el mallorquín tenga dudas.
Quiere asegurarse su participación en el Mundial de Qatar, y para eso es consciente de que necesita ser importante en su equipo. Si el Madrid no le promete eso, hará las maletas, y Florentino Pérez también está dudando sobre si lo mejor sería retenerle, o abrirle las puertas. Aunque, ahora mismo, todos los indicios llevan a pensar que separarán sus caminos, y cambiará de aires para iniciar una nueva aventura en otro lugar, lejos de la capital de España.
En especial, después de que tomara la decisión de unirse a la agencia Gestifute, de la cual Jorge Mendes es el propietario. Pese a que Kylian Mbappé finalmente renovara su vínculo con el Paris Saint-Germain hace unas semanas, eso no parece haber influido en el futuro del mediapunta de 26 años. Si no sucede ninguna sorpresa mayúscula en las próximas semanas, lo más probable es que termine haciendo las maletas.
Solamente queda por conocer dónde se encontrará su próxima parada.