El Real Madrid se ha proclamado campeón de la Supercopa de Europa ante el Eintracht de Frankfurt. Y lo ha hecho con claridad, sin grandes complicaciones y con David Alaba vestido de goleador, anotando el primer tanto oficial de la temporada. El austríaco abrió el marcador tras una asistencia inteligente de Casemiro en la línea de cal en una jugada a balón parado.