Después de todo lo que sucedió durante la pasada temporada en el Real Madrid, Carlo Ancelotti ha conseguido generar pocas dudas en el madridismo en cuanto al reparto de minutos en su plantilla respecta. El italiano hizo que su equipo conquistara LaLiga Santander y la UEFA Champions League dosificando a sus jugadores y logrando sacar lo mejor de ellos en la fase decisiva de la temporada.
Ahora, pocos le discuten los cambios y la gestión de titularidades y suplencias aunque haya decisiones que llaman la atención. En las primeras semanas de competición sobresalió el poco protagonismo que Ancelotti otorgó a Antonio Rüdiger, un futbolista de gran nivel que llegó libre en verano procedente del Chelsea.
El técnico mantenía la confianza intacta en la pareja de zagueros que tan buenos resultados le dio en el pasado (Alaba y Militao) y fue haciendo al futbolista alternar entre suplencias y titularidades intentando que se adaptara a su nueva realidad.
Ahora todo ha cambiado y el futbolista enlaza dos partidos completos de forma consecutiva en LaLiga Santander que han venido acompañados del único duelo hasta la fecha en la temporada en el que no ha tenido ningún minuto (ante el Shakhtar en Champions League).
Ancelotti valora muy positivamente la polivalencia de un futbolista que puede actuar en todas las posiciones de la defensa de cuatro que planea el técnico en sus partidos, y es que en los once encuentros disputados hasta la fecha el futbolista ha jugado como central, lateral izquierdo y lateral derecho.