El Real Madrid afronta un momento de la temporada en la que cada lesión es una catástrofe. Este fin de semana regresa a la rutina después del parón de selecciones y Carlo Ancelotti debe medir muy bien como dosificar a su plantilla para llegar en plenas condiciones a los duelos cruciales. Aunque la mirada está puesta en la vuelta de semifinales de la Copa del Rey contra el Barça en el Camp Nou, el equipo tendrá que recuperar sensaciones este domingo en Liga.
Con el campeonato doméstico prácticamente perdido, el técnico italiano prepara rotaciones necesarias para algunos jugadores que lo han jugado todo en los últimos meses y uno que tiene grandes opciones de ir al banquillo es Fede Valverde.
El uruguayo se ha consagrado esta temporada como un titular fijo en el conjunto merengue. Dueño absoluto de la banda derecha y jugador que completa el tridente de gala con la dupla Vinicius-Benzema, el futbolista ha ido acumulando minutos que a largo plazo supone un riesgo de lesión importante.
Los internaciones han ido llegando a lo largo de esta semana para reincorporarse a los entrenamientos y Fede será el último en llegar. Por ello, As señala que Ancelotti ha decidido junto con el cuerpo técnico que lo mejor es que descanse para el partido contra el Real Valladolid.
Uno de los números que ha sido clave para tomar la decisión es que sólo partió desde la banca en dos partidos en este 2023. Contra el Valencia a principios de febrero jugando 24 minutos y contra el Cacereño pese a jugar luego toda la segunda mitad. En otras palabras, ha disputado el 88% de los minutos totales que ha jugado el Real Madrid. Añadiendo los 180 minutos que ha jugado en los dos partidos con Uruguay en este parón, el equipo no quiere correr riesgos con él.
Es el tercer máximo goleador con doce goles y su rendimiento sigue generando ilusión en el cuadro merengue. Sin embargo, es el momento de rotar y Fede Valverde tendrá que dejar su hueco libre para que jugadores como Rodrygo o Marco Asensio ocupen su lugar.