El partido entre el Cádiz y el Real Madrid, ya en sus primeros minutos, contó con su momento de polémica. Karim Benzema cayó en el área cadista y el colegiado consideró que no había nada punible en la acción. Una decisión que hizo saltar a todo el banquillo madridista.
En el minuto 19 de la primera mitad, un balón controlado por Karim Benzema en el área de David Gil parecía que iba a acabar en gol madridista. Sin embargo, el galo fue derribado por el lateral izquierdo del Cádiz, Pacha Espino. El árbitro no consideró suficiente contacto para decretar que debiera lanzarse el penalti.
Algo que desde el conjunto blanco se criticó de forma clara. Especialmente en el caso de Carlo Ancelotti. El técnico consideró que el agarrón del defensa local impidió que el francés pudiera disparar a portería y, por tanto, se debió lanzar desde los 11 metros.