El Real Madrid se lució ante el Almería con un papel brillante de Rodrygo Goes. El brasileño dio una exhibición en todo el partido con un desequilibrio contaste y un quebradero de cabeza para la defensa rival. Cuando todo parecía que su autopase imposible para asistir a Karim Benzema, su golazo en la segunda parte fue el broche a un partido para recordar del extremo carioca.
En el minuto 47, el brasileño quiso la pelota para cocinarse una jugada tras recibir un balón de espaldas a la portería y, al darse la vuelta con rapidez, sacó un latigazo desde fuera del área directo a la escuadra, un golazo imparable para el portero que tuvo que ver el cuarto tanto del Real Madrid con la firma del mejor jugador del partido junto con Karim Benzema, autor de un hat-trick.