José Mourinho recuerda su peor partido en el Real Madrid: "Lloré conduciendo a casa"

José Mourinho ha reabierto una de las noches más negras de la historia del Real Madrid en la Champions League. El técnico portugués, que actualmente busca equipo tras su destitución en la Roma, recordó uno de los momentos más trágicos cuando estaba sentado en el banquillo merengue.

En un documental de 'Amazon Prime Video', Mourinho repasó toda su trayectoria como entrenador y una de las preguntas que más impacto causaron fue acerca de cuál fue el único partido en el que terminó llorando después de perderlo. Una duda con mucho morbo que no dudó en responder con total sinceridad.

Todo ocurrió en la noche del 25 de abril de 2012, fecha en la que el Real Madrid se jugaba un pase a la gran final de la Copa de Europa ante el Bayern de Múnich en semifinales. Aunque confiaban en que podrían dar la vuelta al 2-1 de la ida en el Allianz Arena, todo el Santiago Bernabéu fue testigo de uno de sus peores desenlaces en la tanda de penaltis.

Después de forzar la muerte súbita, los merengues defraudaron con tres penaltis fallados entre Cristiano Ronaldo, Kaka y Sergio Ramos (su famoso disparo a las nubes), siendo Xabi Alonso el único que acertó. Por contra, los bávaros anotaron con David Alaba, Mario Gómez y Schweinsteiger (Toni Kroos y Philipp Lahm fallaron sus lanzamientos). Un duro resultado que dejó la icónica imagen de Mourinho de rodillas mientras veía la alegría de Heynckes, entrenador del Bayern en aquel momento.

Las lágrimas de Mourinho y la llamada de Jorge Mendes por Cristiano Ronaldo

Doce años más tarde, el técnico ha querido compartir qué paso tras finalizar el partido que les dejó fuera de una final por segundo año consecutivo (en 2011 cayeron ante el Barcelona): "Fue la primer y la única vez que lloré tras un partido. Obviamente no lo hice en el terreno de juego ni en el vestuario pero en el coche mientras conducía de camino a casa, sí". 

Por el camino Mourinho recibió una llamada inesperada para que apoyase a Cristiano Ronaldo, otro de los grandes tocados de la eliminatoria europea: "Yo estaba totalmente hundido y de pronto recibo una llamada de Jorge Mendes para que le hiciese un favor. Quería que fuese a casa de Cristiano Ronaldo porque estaba devastado. ‘Yo también estoy devastado’, le dije pero lo hice. Me preparé, me sequé las lágrimas y fui. Estábamos todos destrozados", confesó.