A sus 17 años, Endrick Felipe ha demostrado tener una gran madurez tanto dentro del campo como fuera de él. Y es que cada vez que habla deja reflexiones cuanto menos interesantes, como cuando reveló que no bebe alcohol por el problema que hubo en su familia. Ya ha debutado con la selección absoluta de Brasil, marcando gol hasta en el Bernabéu, y está a solo unos meses de ser a pleno derecho jugador del Real Madrid.
La carrera de Endrick va viento en popa y recientemente ha concedido una entrevista en su país en el programa Conversa com Bial, donde estaban junto a él en plató sus padres y su novia, Gabriely Miranda. Allí, el atacante brasieño habló de la presión que tenía por ser la persona que sustentara económicamente a su familia:
"Pienso mucho en mi familia, porque sé que en mis manos estaba tener una buena casa, tener comida en la mesa, una buena escuela. Esto se cumplió cuando comencé a hacer una buena carrera en Palmeiras. Cuando tuve el primer contrato se lo pude dar a mi familia, me quité ese peso de encima", reconoció.
Una vez quitado ese peso de encima, el joven crack brasileño se dedica a disfrutar de cara momento que está sobre un terreno de juego. El motivo, lo reveló también en el citado programa, donde sacó a la luz un consejo que le dio Abel Ferreria y que sigue al pie de la letra.
"Hay que entrar al campo para ser feliz, como un niño en un parque de atracciones. Así como me dijo Abel, que tenía que ir a Disney, que era niño y tenía que divertirme. Lo tomé de por vida. Creo que cuando entro al campo, es mi patio de recreo", comentó un Endrick que volvió a recordad la presión de sus inicios: "Quiero jugar en el campo. Llevas la responsabilidad al campo y es horrible. Sentí eso, te sientes muy pesado. Necesitas sentirte ligero, feliz, realmente ser un niño. Igual que mi hermano Noé (4 años), sin responsabilidad de nada".