El Real Madrid volvió a demostrar una vez más que hasta el pitido final del partido no se ha acabado el encuentro. Lo hizo en los minutos finales de la vuelta de semifinales de la Champions League ante el Bayern Múnich en un Santiago Bernabéu que volvió a llevar en volandas a su equipo. Una sensación que el propio Jude Bellingham reconoció tras el final del partido.
Lo hizo en una entrevista postpartido a TNT Sports fue cuestionado por Laura Woods y Rio Ferdinand por lo vivido ante el Bayern de Múnich. "Lo hemos visto muchas veces esta temporada", explicó el inglés expresando que se les da por muertos "y ahí estamos". Un triunfo que dejó claro que daba igual "el que marque el gol, alguien siempre lo hace".
Un triunfo que fue gracias a la exigencia que le imprime el hecho de ser un futbolista del Real Madrid. Así lo reconoció asegurando que, a pesar de que ya cuenten con 14 Champions League "todos hablan de que vamos a ganar la 15ª". "Los compañeros me dijeron que les recordaba a cuando ganaron la Décima y les preguntaban por la 11ª", expresó detallando que eso es "por lo que me encanta estar aquí, no puedes estar conforme". "Siempre estás en una posición peligrosa", desveló exponiendo que los aficionados "no te dan la oportunidad" de relajarte.
En este sentido, sentido explicó que los aficionados del Real Madrid "son los mejores del mundo, de lejos". De hecho, recalcó que saben que cuando están abajo en la eliminatoria, "ellos te dan la energía que no puedes encontrar de otra manera".
Por último, elogió el partido de Joselu señalando que se merecía tener el encuentro que realizó. "Ha sido un miembro increíble del equipo durante toda la temporada y esta es su noche", explicó.
Una exigencia, la expuesta por el británico que ha llevado a varios jugadores a ser criticados tras su marcha del equipo madridista. Uno de los últimos ejemplos fue Raphael Varane. El central galo, en una entrevista a The Telegraph señaló que "los aficionados no te felicitan, te dicen 'muy bien, a por la siguiente". Unas palabras a las que respondía el propio zaguero que, "a veces qwuería apretar el botón de pausa y tener tiempo para celebrar los éxitos".