El Real Madrid se juega este miércoles su primer título de la temporada. Lo hace ante la Atalanta, en Varsovia, en un duelo en el que Kylian Mbappé acapara gran parte de los focos ante la oportunidad de debutar con la camiseta blanca. Eso sí, Carlo Ancelotti ya ha avisado de que quiere premiar a los jugadores que ganaron la Champions League el pasado curso, por lo que la presencia del francés en el once está en el aire tras una última sesión de entrenamiento marcada por la lesión de Eduardo Camavinga.
Thibaut Courtois estará bajo palos y, salvo sorpresa, la línea defensiva estará formada por Dani Carvajal, Antonio Rüdiger, Eder Militao y Ferland Mendy. El nivel de Militao genera cierta preocupación entre la afición madridista, pero lo cierto es que Ancelotti tampoco tiene más alternativas ante la lesión de David Alaba y la salida de Nacho Fernández.
A partir de aquí, llegan las dudas. Ancelotti ha insistido en numerosas ocasiones en "el equilibrio", lo que invita a pensar que podría apostar por un 4-4-2 similar al del curso pasado y, en su idea de premiar a los jugadores que le han llevado hasta la Supercopa, dejar a Mbappé en el banquillo de inicio.
La cuestión es que la baja de última hora de Camavinga acrecenta aún más las dudas. En caso de apostar por un 4-4-2, Tchouaméni ejercería de '5', con Fede Valverde y Jude Bellingham fijos y la opción de que Luka Modric entre en el once, además de Vinícius y Rodrygo en ataque. En el banquillo, además de Mbappé, quedarían también jugadores como Brahim Díaz o Arda Güler.
La segunda opción pasa por un 4-3-3 con Mbappé de titular en punta acompañado de Vinícius y Rodrygo. En este caso, probablemente Modric se caería del once, que podría estar formado en la medular por Tchouaméni, Valverde y Bellingham.