El Santiago Bernabéu está viviendo uno de los partidos más surrealistas de los últimos años. La primera parte del choque ante Osasuna se ha visto marcada por las múltiples lesiones que ha sufrido el equipo de Carlo Ancelotti.
Antes del minuto 20, Rodrygo Goes se llevó las manos a la cara y, entre lágrimas, abandonó el terreno de juego por dolencias, aparentemente, en el cuádriceps izquierdo. Fue Brahim el que entró al terreno de juego para sustituir al brasileño.
Apenas 10 minutos después, Eder Militao notó unas molestias en su rodilla derecha durante una acción en el área de Osasuna. Los gritos del central se pudieron escuchar claramente y el recuerdo de su anterior lesión regresaban a la cabeza de todos los aficionados presentes en el estadio.
Para colmo, alrededor del minuto 40, Lucas Vázquez se tiró al césped del Santiago Bernabéu y pidió el cambio por unas dolencias en el aductor izquierdo. El capitán del equipo encendió aún más las alarmas de un banquillo que no podía terminar de creerse lo que había ocurrido en 45 minutos.
Varios integrantes del cuerpo técnico del Real Madrid se pusieron de pie para dar indicaciones a los jugadores. El principal problema del equipo era que, tras los cambios de Rodrygo y Militao, el conjunto blanco únicamente disponía de una ventana más para realizar una sustitución. Si la gastaban con Lucas Vázquez, no podrían realizar más cambios durante la segunda mitad.
En un principio optaron por llegar al descanso jugando con 10 futbolistas y un "4-4-1" que se se pudo ver claramente del cuerpo técnico madridista. Sin embargo, el lateral gallego, después de ser atendido en el banquillo, donde le aplicaron un vendaje en su pierna, decidió terminar la primera parte. Ocupó su posición habitual de lateral, pero sus dolencias se hicieron notar en una carrera contra Bryan Zaragoza.
A la vuelta del descanso, Carlo Ancelotti decidió sentar a Lucas Vázquez, dando entrada a Luka Modric y así no gastar la única ventana de cambios que le quedaba disponible, utilizando el descanso para realizar la sustitución. Fede Valverde fue el elegido para ocupar la posición de lateral derecho.