Los errores grotescos de Camavinga y Asencio que condenaron al Madrid a la prórroga

El Real Madrid parecía tener la eliminatoria resuelta contra el Celta de Vigo, pero se la complicó en los instantes finales. Los minutos pasaban y Carlo Ancelotti introdujo piernas frescas. Uno de ellos fue Eduardo Camavinga, que una de sus principales funciones serían contener al equipo y evitar el peligro del rival. Pero fue él el que le sirvió en bandeja de plata el comienzo de la casi remontada.

Camavinga y Asencio salen en la foto

Un error en la salida del balón pilló a los centrales abiertos para darle solución y Bamba se encontró una alfombra roja para disparar ante Lunin. Un error impropio de Camavinga hacía que el run run comenzara en el Bernabéu después de que en los primeros minutos se escuchara algún que otro pito.

El Celta comenzó a apretar y otro erro garrafal en defensa del Madrid hizo que los de Claudio Giraldez encontraran el empate. Raúl Asencio quiso despejar un balón que llevaba Bamba y en lugar de darle al esférico, despejó al propio jugador cometiendo un penalti en el minuto 90. Marcos Alonso transformó el penalti para hacer el 2-2 y forzar la prórroga.

El Madrid pasó de tener un partido controlado y solo era dejar que pasaran los minutos a complicarse la vida. Fue en el segundo tiempo de la prórroga en donde el equipo de Ancelotti consiguió encarrilar la eliminatoria.

Endrick por partida doble y  Fede Valverde con un tato marca de la casa sentenciaron el partido (5-2).

El equipo blanco volvió a demostrar que un momento de desconexión o dos, como fue el caso contra el Celta, le perjudicaron y mucho. El partido en defensa hasta ese momento había sido muy serio y esos dos errores les condenaron. Esta vez el Madrid pudo darle la vuelta, pero en otros partido o competiciones, jugadas como esas se pagan muy caro.