Raúl Asencio también recibe pitos en el Reale Arena: tónica habitual para el jugador canario

El Real Madrid ha viajado hasta San Sebastián para medirse a la Real Sociedad en la ida de la semifinal de la Copa del Rey. Con una lista de convocados plagada de bajas y con algunos jugadores descansando para los importantísimos duelos que están por llegar, Ancelotti ha seguido apostando por Raúl Asencio.

El canterano merengue se ha convertido en uno de los hombres de confianza del técnico italiano, pero también en uno de los señalados en todos los estadios de LALIGA, con cánticos, pitos e incluso insultos por parte de los aficionados. Así ha sucedido en Anoeta, que ha pitado al defensa en cada balón que tocaba, recordando el caso de difusión de un vídeo sexual de una menor de edad, por el que sigue imputado junto a otros compañeros de la cantera merengue.

Pitos a Raúl Asencio en Anoeta

El duelo de semifinales de la Copa del Rey ha levantado una grandísima expectación entre los aficionados de la Real Sociedad, que no han dudado en acercarse a Anoeta para apoyar a los suyos. Una victoria en este primer asalto los sitúa muy cerca de una nueva fina, algo con lo que la parroquia txuri urdin sueña.

Con la mejor entrada de la temporada, los aficionados de la Real han cargado contra Raúl Asencio en cada balón que tocaba. Los pitos han sido insistentes en cada toque, propiciando incluso que el hoy lateral derecho perdiera el balón en alguna ocasión.

Asencio, que sigue imputado con más jugadores de la cantera del Real Madrid por difundir un vídeo sexual de una menor de edad, ya ha vivido estos episodios en otros estadios, como en el Sadar en la pasada jornada de liga. Los aficionados de Osasuna insultaron al jugador gravemente. Además de recibir grandes pitadas cada vez que tocaba el esférico, se escucharon durante varios tramos del juego los mismos cánticos que en Anoeta.

Sánchez Martínez detuvo el partido

En el minuto 48 del partido, algunos aficionados de la Real Sociedad entonaron cánticos ofensivos contra Asencio, a lo que el jugador respondió con un gesto de asentimiento hacia la grada.

Ante esta situación, el árbitro detuvo el encuentro y activó el protocolo contra actos violentos, racistas, xenófobos o intolerantes. Sánchez Martínez se dirigió entonces a la Ertzaintza, Carlo Ancelotti e Imanol en la banda para explicar la situación y dar instrucciones.

Siguiendo el protocolo, el club donostiarra pidió por megafonía que cesaran los cánticos y proyectó un mensaje en los videomarcadores del estadio.