En su discurso de despedida, López explicó los motivos de su 'no' a seguir en la presidencia: "Soy un paisano que se viste por los pies, con un mínimo de coherencia tengo que decir que no sigo de presidente del Real Oviedo. Me parece tremendamente injusto que el trabajo de Jorge Sánchez sea tirado por tierra, me parece innombrable. Él comunicó todos los movimientos que hacíamos de forma diaria al máximo accionista. No es justo lo que se hizo en esta junta general desde el Grupo Carso".
Una vez expuestos sus sentimientos por las votaciones, el ya ex presidente oviedista aseguró que "hay que seguir luchando para que el Grupo Carso se encuentre a gusto en este club. Son importantes para el Real Oviedo", lo que no evitó su insistencia en que "fueron tremendamente injustos con su votación con nosotros y los que estuvieron antes. Se juzgaba a un consejo que fue aplaudido por todos ustedes hace un año y esa es la gestión que hoy no se aprueba".
La defensa al trabajo desempeñado por su consejo y también por el anterior en que estaban Toni Fidalgo, Juan Ramón González y Pedro Zuazua fue firme y rotunda: "El máximo accionista es conocedor del día a día del club y del trabajo realizado por todas estas personas. Eso no nos lo va a quitar nadie, ni ninguna lagartija, ni sabandija que escondiéndose en las redes sociales lanza mentiras contra personas que somos igual de honradas que todos ustedes. Este consejo fue leal al Real Oviedo y al máximo accionista. Nos pudimos equivocar pero no hemos engañado a nadie".
Sus últimas palabras sirvieron para agradecer el trabajo de "los empleados del club y a todas las personas que ayudaron en este tiempo. Nos vamos con la cabeza alta y la mirada al frente. Feliz 2014 y que el Oviedo ascienda". Una ovación cerró la intervención de Sabino López que aseguró que esas serían sus únicas declaraciones y que nunca más hablaría en público de la entidad azul.