El técnico del Oviedo arrastraba una sanción de su etapa en el equipo juvenil de División de Honor. Robles fue expulsado y cuando estaba cumpliendo la sanción, en el partido frente al Deportivo, el árbitro recogió en el acta que había incumplido el castigo, por lo que le impusieron un mes de estancia apartado de los banquillos.
El Oviedo daba por hecho que esa sanción se cumplía el próximo día 22, víspera del partido frente al Racing, pero la federación entiende que el aplazamiento de la jornada de División de Honor del pasado 1 de febrero y el hecho de que el mes pasado sólo contase con 28 días son factores que favorecerían al técnico y por lo tanto decidió que no pueda sentarse en el banquillo en Santander y volverá a dirigir al equipo desde la grada, como ha venido haciendo desde que se puso al frente de la primera plantilla azul, hace cuatro jornadas.