Pese a los anuncios de un desplazamiento con más de 2.000 oviedistas en Santander y las deterioradas relaciones entre los seguidores de ambos clubes, la presencia de fuerzas policiales no fue la suficiente para poder tener bajo control a los radicales de ambos bandos.
La principal crítica por parte de la APARO estriba en que "las fuerzas de seguridad, se preocupaban de que el grupo Symmachiarii estuviera fuertemente vigilado y retenido en la grada, más de hora y cuarto antes y después del partido, los apedreamientos y agresiones a aficionados del Real Oviedo, por parte de los radicales cántabros, se producían en el exterior del Sardinero".
Según recoge la nota publicada por la página web de la asociación de peñas la presencia de efectivos policiales se redujo porque las Unidades de Intervención Policial (UIP) "se habían trasladado para actuar ante la 'Marcha de la dignidad'".
Junto a los incidentes sucedidos en los aledaños de El Sardinero y dentro del propio estadio, las críticas de los aficionados azules se extendieron más allá: "Varios grupos de ultras racinguistas esperaron la salida de los autobuses oviedistas para lanzar piedras, pudiendo provocar algún accidente o herido mas, a los ya provocados en el entorno al campo".
Por último, los responsables de la APARO están dispuestos a trasladar su malestar más allá de la nota pública: "Haremos llegar nuestra queja y denuncia de lo sucedido ayer, tanto dentro como fuera del Estadio, ya que consideramos, que no se actuó de la forma más apropiada para la ocasión".