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Un regreso cargado de kilómetros

Noelia Mejías

El Real Oviedo ya conoce a los dos últimos rivales contra los que jugará en Segunda División: Huesca y Bilbao Athletic. Los desplazamientos que hará el conjunto oviedista durante la campaña 2015-16 les llevará a recorrer España de un extremo a otro. El más cercano a Ponferrada y el más lejano a Tenerife.

Si hay algo que ha caracterizado la temporada que ha finalizado recientemente a la afición del Real Oviedo ha sido las numerosas movilizaciones que ha protagonizado para animar a su equipo lejos del Carlos Tartiere.
En la próxima temporada 2015-2016, los viajes del equipo estarán mucho más lejos de la capital del Principado de Asturias, ya que al regresar a la LFP se enfrentará a los 21 equipos restantes repartidos por toda España.
Hasta entonces, los seguidores oviedistas acompañaban al equipo en sus viajes “cercanos” a su lugar de origen, pues el resto de conjuntos que militaban en el grupo I de Segunda B eran próximos. Los desplazamientos más alejados de Oviedo durante la fase regular de la Liga han sido a Guijuelo y a Logroño para medirse al CD Guijuelo y al Logroñés. Dos puntos separados por 367 y 426 kilómetros, respectivamente.
Fuera donde fuese el equipo allí estaba la marea azul para alentarlo desde las gradas. De hecho, el recorrido más extenso que han hecho los aficionados oviedistas fue en el partido de vuelta de la fase de ascenso ante el Cádiz CF. Casi 1.000 kilómetros -897 kilómetros concretamente- viajaron los carbayones para estar con su equipo en el momento cumbre de la temporada cuando consiguieron el sueño: volver a la LFP. No fue la única ocasión en que la movilización de la afición oviedista fue sobresaliente. Al Reino de León acudieron 4.000 seguidores para vivir el duelo ante la Cultural y unos 3.000 acompañaron al equipo al Ruta de la Plata para enfrentarse al Zamora. El viaje a tierras pucelanas fue otro de los desplazamientos que movilizó a la afición carbayona para vivir en directo el choque en el José Zorrilla frente al Valladolid B.
La próxima temporada, el Real Oviedo se moverá mucho más por todo el territorio peninsular e insular, aunque continuará teniendo rivales cerca del Carlos Tartiere. Los azules visitarán a la Ponferradina, de la que le separan una distancia de 218 kilómetros, y al CD Lugo -222 km.-. Serán los recorridos más cortos que tenga la afición del Real Oviedo en su vuelta a la categoría de plata.
Las visitas a domicilio más alejadas de tierras asturianas llevarán a los de Egea hasta territorio insular. Los carbayones se desplazarán hasta Mallorca (1.153) y Tenerife (2.335 kilómetros). Los desplazamientos a Almería, Alicante o Córdoba serán otros de los más largos que realice el equipo en Liga -999, 875 y 845 kilómetros respectivamente-. Otros destinos serán Miranda de Ebro (365), Bilbao (286), Vitoria (345), Pamplona (438), Huesca (655), Gerona (970), etc.
Con la llegada del Real Oviedo a Segunda División, la marea carbayona paseará por todo el país llevando a gala los colores azules del equipo. Lo hizo en Segunda División B y el ansiado regreso a la LFP estará respaldado allá por donde vaya el equipo.

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