"Las balas de verdad comienzan el 23 de agosto"

El portero del Real Oviedo, Esteban Andrés Suárez, valora el estado de forma del equipo carbayón en esta pretemporada. Desea que llegue ya el 23 de agosto y calma un poco los ánimos de la gente que les ve subiendo a Primera. "El año pasado yo interpreto que a los equipos de Primera jugar contra uno de Segunda B no les haría mucha ilusión. Ahora somos un equipo de Segunda, que todo el mundo habla de él, y apetece jugar contra el Oviedo. de ahí los rivales de pretemporada, comparados con el año pasado”, dijo. 

Ilusión previa al comienzo. "Las pretemporadas son la etapa más aburrida, realmente son importantes, pero todo el mundo desean que pasen, al menos yo. Las balas de verdad comienzan el 23 de agosto, y es donde tenemos que estar y para eso hay que hacer pretemporada y cuidarse, para llenar el depósito y empezar a luchar contra nuestros enemigos”.
Ir partido a partido. "Han llegado nuevos compañeros, algunos con mucha experiencia en Segunda División, algunos han tocado en algún momento la Primera, y en general, todo el mundo intentará hacerlo lo mejor posible para confeccionar el mejor equipo posible. Primero habrá que ver cómo estamos nosotros, y luego competir contra otros, no me atrevo a decirte mucho más porque seguramente que si te pregunto a ti por cuatro jugadores del Mirandés no los sabes, y es un rival nuestro”.
Saber de dónde venimos. "Ya lo dije en la promoción de ascenso, no nos podemos olvidar de lo del año pasado, no sé a donde va a ir este equipo, tiene potencial para conseguir muchas cosas, pero sí de donde salimos. Salimos de Astorga, y llevábamos años ahí. Yo no sé a donde vamos a llegar, pero sí de donde salimos. Esto es un justo premio para los que estuvimos."
Estado de forma. "Físicamente, perfecto, anímicamente feliz. Juego en el club que quiero, y el cariño que me llevé este verano, que tuve la fortuna de que me invitaran a Colombia, el cariño de la gente de la Liga porque volvamos, porque volví. A veces me sonrojo con todas las muestras de cariño por la calle y después de cuarenta años casi jugando al fútbol no se puede pedir mucho más."