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La vida sigue casi igual

María Trigo

La jornada 29 de Segunda División ha terminado este domingo con la derrota del Leganés, el líder, contra el Tenerife (0-1). Todo hacía indicar problemas para el Real Oviedo, pero al final las consecuencias de no ser capaz de ganarle al Valladolid han sido mínimas.

 
El fin de semana no ha ido mal para los intereses azules, ya que también han perdido los dos primeros clasificados, el Leganés y el Alavés frente a Tenerife, Osasuna y, por lo tanto, los de Sergio Egea siguen siendo terceros y logran mantener las distancias con los dos equipos que ocupan los puestos des ascenso directo.
Además, el Córdoba fue incapaz de doblegar al Lugo (1-2) y no ha adelantado en la tabla a los carbayones. Lo negativo de la jornada es que el empate del Nàstic ante la Ponferradina y el triunfo del Zaragoza contra el Albacete hacen que la clasificación se ajuste aún más y que más clubes puedan luchar no solo por entrar en el play-off, sino por luchar por el ascenso directo.
A pesar de todo, que haya pasado una jornada más y que el Real Oviedo siga a tres puntos del segundo y a seis del primero es una muy buena señal. El sueño de subir a Primera División sigue muy vivo y la derrota frente al Valladolid le debe servir a los azules para mejorar.

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