Ya no valen experimentos

El Real Oviedo trabaja en la confección de la plantilla para la temporada 2017-2018 con el objetivo de lograr pelear por el ascenso a la Primera división, algo que no se pudo conseguir finalmente en las últimas dos temporadas en la categoría de plata del fútbol español. Tras David Generelo y Fernando Hierro, el club ya no quiere experimentos y busca entrenador contrastado.

Sergio Egea se hizo cargo del banquillo tras lograr subir al equipo desde la Segunda B. El técnico argentino cuajó una gran competición hasta que decidió dejar el equipo por temas personales con aún dos meses de Liga por delante. Entonces, David Generelo llegó al banquillo siendo el primero de los experimentos. Técnico que acababa de colgar las botas, que pasó con más pena que gloria y dejó fuera de la fase de ascenso a los azules cuando lo tenían en la mano. 
Ya en la presente temporada, Joaquín del Olmo advirtió que llegaría un técnico de renombre y con experiencia. Finalmente, Fernando Hierro era el elegido para debutar además en los banquillos, como había ocurrido con Generelo escasos meses atrás. El malagueño hizo una temporada aceptable pero el equipo nunca logró dar la cara fuera de casa y se quedó fuera de la fase de ascenso después de estar dentro durante muchas jornadas.
Este fracaso ha hecho que ahora sí el equipo de la capital del Principado de Asturias haya cambiado de opinión y sí se opte por traer técnicos con experiencia. El ascenso es un objetivo real y necesario. Por ello, Anquela o Bordalás ganan fuerza para estar en el banquillo carbayón la próxima temporada.