El Real Oviedo consiguió tres puntos de oro en Tarragona en un partido loco en el que consiguió la victoria en el minuto 93 con un penalti en el que Aarón remata mordido. Anquela se mostraba satisfecho en sala de prensa y era consciente de que el conjunto azul mostró dos caras.
Ese cambio de cara era una de las primeras cosas que analizaba Anquela: "El equipo no ha estado mal. Hemos cogido un justo premio ante un rival muy difícil. Se nos había puesto la cosa muy difícil y tenemos que valorar este triunfo [...] En la segunda parte el equipo ha sido otro. Hemos sido valientes. Si no somos valientes no se consigue nada. Tenemos que disfrutar de una victoria importantísima y pensar en el siguiente ya desde dentro de un rato".
En la primera mitad sobre todo el Oviedo volvió a conceder atrás y de eso también era consciente el entrenador andaluz: "Las ocasiones de ellos en la primera parte han sido errores muy gordos. Creo que lo solventaremos e iremos progresando día a día porque son gente de sobrada experiencia y valía. El fútbol cuando se pone revirado hay que saber conducir en esas carreteras. En esas facetas el fútbol lo tenemos un poco torcido".
La importancia de la victoria es máxima y también lo reconocía Anquela: "Me interesan los tres puntos. Sumar. Lo digo siempre, que esto es muy largo. En Segunda división lo importante es sumar y estar vivo los dos últimos meses. Si llegas vivo ahí tienes posibilidades de todo. Aquí nadie regala nada y hay que pelear y sufrir. No sé ni como ha entrado el penalti, solo vi que se movía la red. Nuestro momento ahora es de sufrir y saber estar juntos, pero hay que estar tranquilos".
Sobre el cambio táctico también ha hablado, con esa modificación al descanso: "Defensa de cinco no; de tres. A Mossa y Cotugno los mandamos arriba. Salió bien porque la gente nunca perdió la fe y veíamos que teníamos posibilidades y llegábamos. Ellos tienen el 2-0. Si la mete Uche se acaba el partido, pero yo no vi ninguna más, pero era un momento decisivo".