El vestuario del Real Oviedo cada día es un poquito más islandés. Los jugadores carbayones se despidieron hoy de la afición realizando la coreografía que caracteriza al combinado nórdico, del que Diegui Johannesson forma parte, siendo el encargado de contagiar a sus compañeros.
El lateral de la Villa está atravesando un gran momento de forma, que demuestra incluso con goles, una faceta a la que no estaba acostumbrado. El de este domingo es el Segundo gol de la temporada, y este además con un valor añadido, ya que fue el único tanto que se vio en los 90 minutos significando así los tres puntos.
Es uno de los grandes beneficiados del nuevo dibujo de Anquela, apareciendo como un obús siempre por banda derecha y llegando a zonas de remate, algo en lo que insiste el entrenador andaluz, que tiene ahora mismo en Diegui Johannesson a uno de sus jugadores franquicia de la plantilla.