El Real Oviedo está atravesando un mal momento en cuanto a resultados y en cuanto a sensaciones, acompañado además de malas noticias en el apartado de sanciones, que hacen que Anquela tenga numerosas bajas para el encuentro ante el Granada. Pero entre todo ese panorama, surge la figura de Fabbrini, que está siendo de lo mejor en los últimos partidos y que teniendo en cuenta su estado de forma, podría abrir la puerta a un cambio de sistema.
Y es que este Real Oviedo se idea en pretemporada en torno a la figura de Fabbrini. El italiano estaba llamado a ser, desde la mediapunta, el jugador sobre el que girara el ataque carbayón, pero la inoportuna lesión que le apartó hasta 2018 impidió que el 4-2-3-1 se asentara, y Anquela encontró la solución en este dibujo con dos carrilleros largos.
Con los bache de resultados y la figura de Fabbrini ya recuperado y dejando buenas sensaciones podría abrirse otra vez la opción de cambiar el dibujo. El jugador italiano ya es uno más e incluso fue titular en el partido ante el Barça B, dejando buen sabor de boca y siendo la nota positiva y el factor que puede ser determinante a la hora de abordar cambios.