Dos victorias consecutivas desde el cambio de sistema sufrido en el Anxo Carro han insuflado el optimismo de nuevo en la hinchada azul. El Real Oviedo ha vuelto a aparecer en los puestos de play off tras las últimas modificaciones de Juan Antonio Anquela.
El técnico carbayón, además de cambiar el esquema, ha realizado un par de retoques en el once inicial que le han aportado al equipo algo de frescura, aspecto necesario de cara a esta recta final de temporada. Cotugno le ha dado oxígeno al equipo en el carril derecho y Mariga en el doble pivote.
Estas modificaciones le permiten a Anquela gozar de alternativas en el banquillo gracias a las características de Diegui y Mossa. Son dos cambios fijos, en función de lo que se necesite en el partido. Si el equipo está por delante, para formar con doble lateral en ambos costados. Si el equipo está por detrás, para darle mordiente al ataque desde la posición de los laterales.
A ellos se les une David Rocha, que también está siendo el elegido en los últimos partidos para aportar músculo en el centro del campo en las rectas finales. Y es que en los dos últimos partidos, Anquela ha usado a los mismos 14 jugadores. Los once de inicio, más Mossa, Diegui y Rocha.