El Real Oviedo se ha entrenado este lunes en las Instalaciones de El Requexón con una sesión más ligera para los jugadores que disputaron más minutos contra el Rayo Vallecano que no saltaron al césped de la ciudad deportiva. La buena noticia ha sido la presencia de Saúl Berjón al mismo ritmo que los jugadores que no jugaron en la tarde del domingo. Alfredo Ortuño ha sido el encargado de analizar la situación del equipo en sala de prensa.
El equipo consiguió los tres puntos en la recta final del partido gracias al penalti convertido por el murciano y ha salido del descenso. "Necesitábamos una victoria, se dio contra un equipo con muchos jugadores en Primera. Eso dice mucho de lo que es capaz este equipo y de lo que somos capaces de hacer cuando defendemos la misma idea".
A pesar de haber sufrido hasta el final, el pichichi del equipo ha valorado positivamente la actitud defensiva. "Dimos un paso adelante y fuimos a por el partido. El Rayo no nos generó nada durante el partido, y se vio un equipo muy fuerte defensivamente". Arribas cometió un fallo en el gol del Rayo, pero aún así ha tenido una buena actuación: "Aquí vamos a fallar todos y si no fallásemos, no seríamos que futbolistas ni personas. pero hay momentos en la temporada delicados como este, en el que el equipo necesitaba la victoria, y el fallo parece doble, Arribas hizo ayer un partido espectacular contra uno de los mejores ataque", destacaba Ortuño.
El Oviedo ganó con un gol de penalti que fue señalado por el VAR, porque Pulido Santana había apreciado la acción de manera contraria. Así lo vio Ortuño: "Me quedé flipando de que le sacara tarjeta amarilla a Nieto. Tenemos el VAR afortunadamente para corregir estos errores. Había que meter el penalti, estuve con Dimitrievski y algún penalti le había metido".
Después de cinco semanas sin ganar, los jugadores son conscientes de la gravedad de la situación y están responsabilizados para afrontar el futuro. "El equipo ha cambiado mucho en una semana, han pasado siete días pero parecen dos equipo totalmente diferentes. Tenemos que ser un equipo difícil de batir en duelos. Nos hemos dado cuenta de que nos estamos jugando mucho y hay que ser más responsables y estar concentrados los 90 minutos".
Aunque los jugadores en rueda de prensa decían lo contrario, la inestabilidad extradeportiva del Oviedo les afectaba en el día a día y ha sido una circunstancia a tener en cuenta para explicar la mala racha del equipo. "En este último mes el equipo se había olvidado de que lo importante es lo que pasa de la línea blanca hacia dentro y el ruido de la línea blanca hacía afuera nos había distraído. Esta semana nos hemos centrado en los tres puntos y lo que pase en el club no es nuestro trabajo, nosotros tenemos que entrenar y competir".