Una final, otra más, para despedir el año
Todavía queda por disputar la mitad de la temporada pero en el entorno del Racing de Santander ya se están acostumbrando a hablar de "finales" de manera recurrente y el partido ante el Real Oviedo se presenta como otro partido decisivo en las aspiraciones de permanencia del conjunto cántabro.
Racing y Oviedo llegan al encuentro en una situación muy pareja, luchando en los puestos de descenso y ambos eliminados esta misma semana a las primeras de cambio en la Copa del Rey ante equipos de menor categoría.
Este último fracaso queda minimizado porque lo importante para los dos equipos pasa por conseguir la salvación, tras un inicio de temporada muy irregular que les ha llevado a esta situación.
En el Racing, Cristóbal Parralo sigue sin dar con la tecla buscando "el equilibrio" que cree que le falta a su equipo, pero al menos parece que para este encuentro podrá contar con Karim Yoda, máximo goleador del conjunto verdiblanco. También podrá tener a su disposición a Figueras y Mario Ortiz tras cumplir sus respectivas sanciones.
A pesar de que el partido ha sido declarado de alto riesgo y la Policía Nacional ha prohibido el tifo que había preparado La Gradona para recibir a los equipos, como castigo por los altercados ocurridos en los prolegómenos del encuentro ante el Zaragoza, se espera un gran ambiente en El Sardinero, que contará con la presencia de 1.200 aficionados ovetenses.
Choque vital
El Real Oviedo visita Santander tras su eliminación copera ante el Badalona y su derrota liguera ante el Cádiz (0-1), resultados que quiere revertir en la última jornada de Liga ante un Racing que es rival directo por mantener la categoría en la temporada más difícil para los azules desde que regresaron al fútbol profesional.
El conjunto carbayón se enfrenta al antepenúltimo en la última de las cinco finales que ha jugado en este tramo final de primera vuelta, periplo que se cierra con dos victorias -ante Rayo Vallecano y Alcorcón- y una derrota, la del pasado domingo ante el líder, y que quiere culminar con una nueva victoria que le permita alejarse de un descenso que ahora tiene solo a tres puntos.
La eliminación en Copa del Rey ante un Segunda B hace prácticamente imposible que ninguno de los no habituales se haya ganado un hueco en el once, por lo que lo más probable es que el técnico azul, Javi Rozada, repita alineación por cuarta jornada consecutiva.
El ovetense sigue sin contar con Berjón, que se recupera de una artroscopia, y no tiene bajas por sanción, por lo que los descartes son todos por decisión técnica y varios de ellos porque están en la rampa de salida y sin minutos de cara al mercado invernal como es el caso de Omar Ramos, Joselu y Diegui Johannesson, que ni siquiera viajaron en Copa del Rey.
El técnico no descartó hacer uno o dos cambios en función del rival, un Racing al que espera resultarle "incómodo" y al que ve mucho más vertical desde la llegada de Cristóbal al banquillo aunque mantengan jugadores y el sistema (4-2-3-1).