Ibra: "Me da vergüenza que me vean por la calle, no estoy haciendo bien mi trabajo"
El delantero del Real Oviedo Ibra Baldé, no está cumpliendo con las expectativas desde su llegada a Asturias. El senegalés, llamado a liderar el ataque con su vasta experiencia internacional, no termina de entrar en los planes de Javi Rozada. No obstante, su gol 'in extremis' ante el Huesca en la pasada jornada de LaLiga SmartBank salvó un punto en el Carlos Tartiere.
"El gol ante el Huesca me dio oxígeno, me sentí orgulloso", ha confesado en una entrevista reciente en La Nueva España, en la que además proyecta algunos de sus temores. Llegado en 2018, el delantero africano apenas pudo marcar tres goles antes de caer lesionado en diciembre de ese mismo año.
Una rotura de fibras mantuvo apartado a Ibra de la dinámica de su equipo hasta el 3 de febrero, cuando disputó ocho minutos ante el Cádiz seis jornadas después. Desde entonces hasta el final de curso, tres goles más inflaron su estadística hasta los seis en total.
Sus números tampoco mejoraron en el arranque de su segunda temporada, la última según contrato. Los diferentes técnicos con los que ha convivido en El Requexón lo han considerado más como un revulsivo que como un futbolista que pueda cumplir de inicio. De los 13 partidos que ha disputado en el presente curso, en todos salió Ibra desde el banquillo.
El culmen del curso llegó en la pasada fecha de LaLiga SmartBank, cuando sumó el tercer gol a su cuenta anotadora. Un tanto que, además de oxígeno, también ha servido para conocer más de cerca las sensaciones de un futbolista que no termina de rendir. "Me da vergüenza que me vean por la calle sabiendo que no estoy haciendo el trabajo que tengo que hacer", confesó.