La entrada de Lucas Ahijado en detrimento del lesionado Juanjo Nieto era la principal novedad en el once titular del Real Oviedo ante la SD Ponferradina. El técnico carbayón, 'Cuco' Ziganda, explicó al término del partido que la baja del castellonense se debía a unos "problemas musculares", y del mismo modo alabó la actuación del canterano: "No era un partido fácil para Lucas, llevaba tiempo sin jugar. Ha cumplido, ha estado bien y ha acabado de los mejores del equipo, soltándose", señalaba el entrenador vasco.
Este sábado era el defensor asturiano quien tomaba la palabra para, ya en frío, analizar sus sensaciones tras tanto tiempo sin jugar: "No fueron malas. Me encontré bien, pero todavía se puede mejorar y en eso estamos trabajando para el próximo partido", explicaba un Lucas que reconocía que Ziganda le dijo que sería titular el día anterior al encuentro.
Ahora, el ovetense espera ganarse el favor de su técnico, aprovechando también la baja de Nieto: "Al final es el míster el que decide. Yo trabajo para ganarme el puesto, tener una oportunidad y si no me pone tendré que seguir trabajando y esforzándome para que al final pueda jugar y disfrutar en el campo con mis compañeros", señalaba.
Sobre el partido, Lucas reconocía las dos caras del Real Oviedo: "Creo que estuvimos sólidos en defensa, las ocasiones que nos generamos las supimos solucionar. En ataque nos faltó un poco más y ya estamos trabajando en ello". "Creo que el parón influye, es mucho tiempo sin jugar juntos y eso el equipo lo nota, falta esa coordinación en los movimientos".
A modo de cierre, el canterano carbayón explicaba sus sensaciones en un Carlos Tartiere sin público en sus gradas: "Frío. La afición siempre está ahí, te apoya, y no tenerla para que te anime en esos momentos difíciles, para que te ayude a salir de ellos, es difícil. Se nota la falta de la afición".