El jugador del Real Oviedo Borja Sánchez reconoció este viernes que tanto a él como al resto de futbolistas que continúan de azul este año les toca "dar un paso al frente" para poder mirar hacia arriba en la tabla. El ovetense fue franco respecto a las dos últimas campañas, en las que arrancar mal lastró al equipo y acabó sufriendo mucho, y dio especial relevancia a "empezar lo mejor posible" aun a sabiendas de que faltan efectivos por llegar al equipo.
"Van a llegar futbolistas que nos ayudarán un montón, pero tenemos que centrarnos en los que estamos aquí. Los partidos, a largo plazo, creo que se van a ganar con el bloque que formemos nosotros ahora. Tenemos que mantenernos un poco ajenos al tema fichajes", apostilló en relación al mercado.
Uno de los refuerzos que ya está en dinámica azul, Pierre Cornud, es precisamente su pareja de baile por la banda izquierda, combinación de la que el canterano cree que "pueden surgir muy buenas cosas" junto a un lateral "que suma al ataque y aporta centros".
El atacante también aclaró el sentir del equipo respecto a la situación de Alejandro Arribas, que se despidió del vestuario el pasado lunes pero es posible que regrese en los próximos días tras no llegar a un acuerdo con el Aris de Salónica para su fichaje.
"Ha sido un poco complicado, pero nada que dependa de nosotros. Nos dolió su marcha y ahora estamos un poco a expensas. Nos centramos en entrenar. Ante la falta de jugadores están los chicos del filial, que nos están dando la vida y están a muy buen nivel", explicaba el ovetense.
Sobre su puesto en el equipo del 'Cuco' Ziganda, que está cambiando el esquema al de 4-3-3 esta pretemporada también hablaba Borja Sánchez: "Es una posición en la que me gustaría jugar, aunque de momento me mantengo en banda, pero sí que es cierto que el sistema abre la posibilidad de jugar también ahí. Ojalá en un futuro", comentó el jugador en referencia a un dibujo en el que ahora es Sangalli quien ocupa los espacios por dentro.