El Real Oviedo se interesó durante el pasado mercado estival por Roberto González. Sabían que estaba disponible y que el Real Betis no pondría problemas a su cesión, y Jon Pérez Bolo pidió personalmente su llegada. Lamentablemente, no fue posible llegar a un acuerdo, y acabó aterrizando en el Deportivo Alavés.
Pero allí las cosas no le están yendo como esperaba, pues a pesar de los buenos resultados colectivos que están obteniendo, su papel está siendo claramente secundario. Únicamente ha participado en tres encuentros de LaLiga SmartBank, ninguno de ellos como titular, acumulando un total de 91 minutos, en los que ha sido capaz de dar una asistencia. Claramente no es lo que le prometieron, pues se fue allí esperando ser titular indiscutible.
Su progresión corre peligro, pues a sus 21 años lo que quiere es jugar y tener continuidad. Y si la situación no mejora drásticamente en las próximas semanas, solicitará abandonar Mendizorroza en el mes de enero. Desde el Benito Villamarín no quitan el ojo de encima a su gran joya, y no tendrán problema en rescindir antes de tiempo el contrato de alquiler que pactaron con los ‘babazorros’, para buscar un nuevo destino al extremeño.
Una noticia que ha llegado a los oídos de Bolo, que ha solicitado nuevamente a Róber. De hecho en el Carlos Tartiere volverán a hacer todo lo necesario para poder llevarse al habilidoso extremo, que en su momento llegó a tener ofertas de grandes clubes de dentro y fuera de España.
Así que uno de los primeros refuerzos que la afición del Oviedo puede esperar es el ex de la Unión Deportiva Las Palmas. Aunque aún es pronto para dar nada por hecho, y todo puede cambiar mucho próximamente… lo que es seguro es que los asturianos probarán suerte.