Pese a que el Real Oviedo lleva solo dos puntos de los últimos quince en juego, el último partido de los carbayones ante el Tenerife sirvió para mejorar las sensaciones y recuperar una solvencia defensiva que se había perdido en los cuatro partidos anteriores de LaLiga SmartBank.
Aún así, dejar la portería a cero ante los chicharreros solo sirvió para sumar un punto en el Tartiere. Porque el principal problema del equipo de Álvaro Cervera es la faceta goleadora: llevan toda la temporada marcando como mucho un gol por partido.
En la búsqueda por implementar mejoras en lo ofensivo, el técnico sigue buscando soluciones que no pasen por meter a la vez "dos extremos, dos delanteros y un mediocentro ofensivo", algo que, advierte, solo llevaría a los suyos a encajar más.
Con la idea de hacer crecer al equipo manteniendo ese armazón, e implementando cosas sencillas, viaja a Leganés marcado de nuevo por las bajas, ya que pierde a uno de sus mediocentros habituales, Jimmy, por la luxación de hombro que sufrió ante el Tenerife.
Montoro y Mángel se postulan para sustituir al ovetense en el doble pivote con Luismi, y en la convocatoria ya lo hace el canterano Yayo, uno de los jugadores más prometedores del filial y principal novedad de la lista junto a un Camarasa que aún no está para jugar un partido entero pero regresa tras las dos semanas de reposo que le pidió su rodilla operada.
Junto a Jimmy, se quedan en Oviedo los lesionados Pomares y Rodri Tarín, y finalmente no viaja tampoco un Leo Sequeira que a final de semana tuvo que volver a tratarse de sus problemas musculares y con el que el cuerpo técnico no ha querido arriesgar.
Por contra se mantiene en la lista, y también en el once, un Abel Bretones que solo pudo entrenar dos días con el equipo -faltó dos por un esguince leve y otro por una gastroenteritis-, pero que ha acabado por recuperarse a tiempo para ser uno más en Leganés.