Rubén Pardo ha vuelto a ser 'condenado' a la exclusión. El centrocampista de la Real Sociedad no formó parte de la lista de convocados de Asier Garitano para el partido de la Copa del Rey ante el Celta el pasado miércoles en Anoeta. Lo normal es que en estos encuentros cuenten con minutos los futbolistas menos habituales, pero no fue así para el mediocentro.
Sin embargo, la temporada empezó muy bien para Pardo. El de Logroño comenzó la campaña 2018/19 siendo un habitual en las alineaciones realistas. Jugó nueve partidos, siendo titular en siete de ellos y sumando un total de 606 minutos. De hecho, sumaba ya tres veces más minutos jugados que en toda la pasada temporada. Pero a partir de la ida de los dieciseisavos de final de la competición del KO, todo cambió.
Desde el 1 de noviembre, fecha en que tuvo lugar el partido copero ante el Celta en Balaídos, Pardo no ha vuelto a saltar al césped. Y ya acumula cinco partidos de forma consecutiva en el ostracismo. Calentó banquillo en los partidos ante el Sevilla FC, el Celta (en LaLiga Santander) y el Real Betis y ni siquiera formó parte de la expedición que viajó hasta Valencia para enfrentarse al Levante en la jornada 12 de competición.
Una situación, tal y como indica Mundo Deportivo, que podría cambiar el futuro de Rubén Pardo. El futbolista riojano tiene contrato con la Real Sociedad hasta junio de 2020 y desde la entidad txuri urdin estaban dispuestos a ampliar esta relación contractual, hecho que Pardo veía con buenos ojos hasta el momento.
No obstante, estos últimos cinco partidos pueden haber cambiado la opinión del mediocentro. Ha pasado de ser uno de los jugadores realistas con más minutos en el inicio de temporada a no tener apenas protagonismo en los planes de Garitano.