Hace dos temporadas, Mikel González puso fin a su etapa en la Real Sociedad para enrolarse en el Real Zaragoza. Un año después llegó al AEK Larnaca de Chipre. El cancerbero Toño Ramírez tuvo que ver mucho en esta decisión. Mikel fue tentado por otros equipos chipriotas, pero la amistad que le une al exguardameta txuri urdin y el gran número de jugadores españoles que existe en este equipo le hicieron decantarse. "La adaptación era más fácil y el grupo muy bueno", dijo Toño en declaraciones a ElDesmarque.
Mikel González puso fin en el verano de 2017 a su dilatada trayectoria en casa, ante su gente, con la Real Sociedad. Tras un año en el Real Zaragoza, el zaguero hizo las maletas para partir hacia tierras chipriotas. Varios clubes del país tentaron al jugador, pero finalmente se decantó por el AEK Larnaca, una decisión en la que tuvo influencia un amigo que ya jugaba en el cuadro chipriota por segunda ocasión: Toño Ramírez.
"Siempre comentamos los partidos de la Real Sociedad en directo o al día siguiente en los entrenamientos"
"Mikel me llamó cuando sabía que vendría, tenía una oferta de otro equipo de Chipre, yo hablé con él y le expliqué todo", recuerda Toño Ramírez en ElDesmarque. "Al final se decantó por nuestro equipo, estaba yo y había más españoles, la adaptación era más fácil y el grupo muy bueno. Eso hace mucho y genera que el AEK compita al nivel que está compitiendo actualmente", agregó al respecto.
En la localidad de Lárnaca, ambos viven en paz, disfrutando del fútbol y analizando cada semana los partidos de su Real Sociedad. La diferencia horaria y las obligaciones familiares les impiden ver los partidos juntos con asiduidad, pero no pierden detalle de lo que hace su equipo cada jornada. "No quedamos para ver los partidos porque normalmente la Real juega por la tarde o por la noche y aquí es una hora más, el tiene niños y yo también, pero siempre vamos comentándolo por el móvil, en directo o al día siguiente en los entrenamientos".