Antoine Griezmann volvía a la que fue su casa. El francés visitaba el Reale Arena por primera vez desde que es jugador del Barcelona, y el galo fue recibido con indiferencia por parte de la afición de la Real Sociedad.
Griezmann fue además el autor del gol del empate a uno en la primera mitad, un bonito gol de vaselina que marcaba tras un error de Diego Llorente.
Sin embargo el francés, como es habitual cada vez que ha jugado contra la Real y ha marcado, no lo celebró. Al término del encuentro dio las razones de este gesto:
"Nunca voy a celebrar aquí. Ya marqué algunos pero tengo mucho respeto por mi pasado aquí", reconoció Griezmann.
Sobre el partido, el francés señaló que "los dos equipos tuvieron su momento. Tuvimos ocasiones pero la Real Sociedad en el segundo tiempo empezó bien, apretó y empató. Buscamos el tercero, pero no pudo ser". El delantero rechazó considerar el marcador como justo. "No sé si será justo. Los dos tuvimos ocasiones para hacer el tercero y ganar. Ahora a pensar en el clásico", añadió el atacante, autor del primer gol de su equipo, que no celebró.