Antonio Escandón tuvo el infortunio de que se cayó de la cubierta de Anoeta mientras se estaba remodelando el Reale Arena. El operario valenciano que se cayó desde unos 20 metros de altura estuvo tres semanas grave en la UCI del Hospital Donostia.
Fue el pasado 17 de julio cuando Escandón cayó desde la cubierta del estadio de Anoeta hasta el césped, una caída de unos 20 metros de altura que le provocó múltiples daños y que le tuvo tres semanas en la UCI. Llegó al Hospital Donostia con el cráneo aplastado por la parte frontal del golpe, la caja torácica aplastada, costillas rotas –una de ellas le perforó el pulmón–, un codo fracturado y la pierna derecha destrozada.
El valenciano fue operado este martes y se le ha puesto una prótesis en su pierna derecha. Antonio, residente en un pequeño municipio valenciano, Paiporta. El doctor Cavadas le había contado que iba a recuperar el 80% de la movilidad en la pierna. Él se conforma con llegar al 50%: "Eso ya sería mucho", afirma Escandón.
El operario no puede mostrar más agradecimiento, en primer lugar a las gestiones encabezadas por Igor San José, responsable de la Construcción del sindicato ELA. Y sobre todo a Jokin Aperribay, presidente de la Real Sociedad, al que da las "gracias" por haberse "preocupado" en todo momento.
Ahora el valenciano tiene un reto y también una 'promesa' volver andando a Donostia, comerse un chuletón y visitar el remodelado estadio de Anoeta, que él no pudo ver finalizado completamente.
La operación a la que ha tenido que ser sometido este martes, duró más de cinco horas y que salió "muy bien", según cuentan sus familiares. "Aunque la pierna tenía más trabajo del que se pensaba en un inicio", continuaba la familia del valenciano. La intervención tuvo lugar en el Hospital Nueve de Octubre de Valencia. A cargo del doctor Pedro Cavadas, especialista de reconocido prestigio en cirugía reconstructiva.