Una experiencia inolvidable en Tokio y una pizca de picardía: "Sé de uno que quería llevarse el edredón"

Participar en unos Juegos Olímpicos es algo que nadie olvida. En ello coinciden los cinco homenajeados por la Real Sociedad: Odei, Oyarzabal, Merino, Zubimendi y Sagnan. Una experiencia que, para la mayoría, será irrepetible y de la que todos quieren tener siempre los mejores recuerdos. También de forma material.

Las sonrisas se dibujaron en los rostros de todos cuando les preguntaron sobre si se habían llevado algún recuerdo de su estancia en Tokio, bien del hotel y bien de los propios Juegos. La picardía saltó a escena. "Yo sé de uno que tenía la intención de llevarse el edredón, pero los de la villa creo que son más listos y el último día no estaban", continuaba entre risas Mikel Merino. "Tanto yo como mi compañero de habitación no pudimos, no sé si Mikel fue más listo".

"Yo volví con más cosas de las que me llevé para allá", añadía Odei. Sin duda, un momento único que ninguno olvidará jamás.

El propio Oyarzabal explicaba qué ha sido para ellos esa estancia durante tantos días con los mejores deportistas del mundo. "Son cosas que se viven una única vez solo y es algo que no vas a conseguir vivir o ver en otros torneos. El poder estar reunidos con 10.000 atletas y ver cada día que bajas al comedor a gente que no vas a ver en otras circunstancias es algo que nos vamos a llevar para nosotros. Quizá el fútbol en las olimpiadas no es el deporte que más repercusión tiene, pero es una experiencia que nos vamos a llevar solo nosotros, ha sido espectacular", agregó.