La Real Sociedad afrontaba con optimismo la visita de un Sevilla FC que aspira a todo, pero con preocupación por la baja de David Silva, y ante la duda de cómo estaría el equipo físicamente después del enorme esfuerzo del pasado jueves ante el PSV Eindhoven. Y lo cierto es que el grupo superó el examen con nota aunque con un lesionado más, Alexander Isak.
La baja de Silva fue determinante la pasada temporada en los muchos partidos que el canario se perdió por lesiones, pero esta vez, aunque no se ganó, el resultado se puede considerar positivo.
Imanol Alguacil tuvo que recurrir de nuevo al Sanse para completar la convocatoria, e incluyó a jugadores como Valera, Romero, Turrientes o Lobete. Entre los once que acabaron el choque estaban Lobete o Valera, que debutaba con el primer equipo, y una gran mayoría de jugadores formados en Zubieta ante un rival, el Sevilla, con una profundidad de banquillo de las más largas de Primera.
Sin embargo el equipo dio la cara en todo momento, y supo jugar cuando más volcado estaba el equipo de Lopetegui, incluso jugando con inteligencia los instantes finales provocando dos saques de esquina consecutivos y con una gran ocasión de Januzaj para haber desnivelado el encuentro.