El Olentzero tendrá mucho trabajo esta noche. Es el día de repartir sorpresas y regalos en los hogares guipuzcoanos, aunque parte del 'trabajo' ya lo adelantó al pasado mes de abril. Concretamente al día 3, y en el Estadio de La Cartuja. El deseo de todos los realzales era ganar 34 años después un nuevo título, y esa oportunidad iba a tener lugar ante el eterno rival. Pese a que la pandemia impidió la presencia de aficionados en las gradas, los televisores en Donostia y el resto de la provincia tenían una clara protagonista: la Real Sociedad. Los de Imanol Alguacil tenían en su mano hacer felices a cientos de aficionados txuri urdin y no defraudaron.
Un gol de Mikel Oyarzabal en el minuto 58 por penalti previo de Iñigo Martínez sobre Portu dio el título a los blanquiazules frente al Athletic Club. La diana del '10' fue suficiente para llevarse la Copa a Gipuzkoa. Una fecha que quedará ya para siempre en la historia de la Real Sociedad, y que se pudo celebrar en el Reale Arena 196 días después, en el choque de los txuri urdin ante el Mallorca de la jornada 9, en el que además el conjunto txuri urdin se colocó como líder en solitario de LaLiga Santander. Ese día los jugadores ofrecieron la Copa a la afición.
Uno de los momentos más emocionantes de la final de la Copa del Rey ganada por la Real Sociedad lo protagonizó Imanol Alguacil. El técnico oriotarra, antes de terminar la rueda de prensa post partido en La Cartuja, se enfundó una camiseta del equipo y prendió una bufanda para acercarse al micrófono de la RFEF. Entonces, de forma completamente inesperada, se dirigió a todos los realzales: "Esto va por toda Gipuzkoa, esto va por todos los que sienten la Real. Gipuzkoa, todos conmigo, eh!", y comenzó a cantar. ¡Erreala ale, irabazi arte, beti egongo cara zurekin!
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