Este sábado se disputa en el Nuevo Estadio José Zorrilla el partido correspondiente a la jornada 6 de LaLiga EA Sports. Habrá importante representación de aficionados txuri urdin que tienen en Valladolid uno de sus destinos favoritos para apoyar a la Real Sociedad. El encuentro entre blanquivioletas y blanquiazules también estaba señalado en rojo por Sofía Oliva, una niña de 12 años que residía en Valladolid pero que amaba a la Real Sociedad porque desde pequeña su padre Juan Carlos le inculcó el cariño por el conjunto guipuzcoano.
Sofía estará presente en este partido, pero lo hará brillando desde el cielo ya que el pasado 31 de agosto falleció a causa de una leucemia fulgurante. El club pucelano le recordará depositando un ramo de flores en el asiento que ocupaba como socia, y la Real ha llamado este miércoles a la familia para comunicarle que está invitada también al palco junto a Xabi Prieto.
No serán los únicos que se acuerden de la pequeña. El Parquesol, y aficionados de uno y otro equipo arroparán a la familia de Sofía: el padre Juan Carlos, su madre Raquel e Izana, la hermana pequeña, en un día que estará cargado de sentimientos en recuerdo de una niña que dejó un importante legado y una lección de vida: en estos días de tantas tensiones, insultos y odios, Sofía era capaz de amar a dos equipos a la vez y soñar que el fútbol es una pasión maravillosa.
Juan Carlos Oliva ha estado este miércoles en el Twitch de ELDESMARQUE con Dani Écija recordando a Sofía, y lo que va a ser un fin de semana muy especial.
*Puedes verlo dando al play en el vídeo de la parte superior de la noticia.
"Es muy duro. Sofía se puso mala, y el 26 de agosto le diagnosticaron una leucemia aguda. En Valladolid no le podían aplicar el tratamiento que ella necesitaba y nos derivaron a Salamanca. Falleció el día 31. Fue algo muy rápido, inesperado, porque la niña había estado bien; estamos con el alma rota. Es durísimo y todavía no nos hacemos a la idea de no tenerla. Ahora empezaba una etapa muy bonita en su vida. Iba a empezar el instituto, nuevos compañeros... y el fútbol, que era tanto para ella... Empezaba a entrenar ya con el infantil del Parquesol y se va a perder todo eso. Llenaba tanto la casa, que cada recuerdo es ella. Es muy difícil y la tristeza es enorme".
"Mi mujer y y somos sorianos, mi mujer del Burgo de Osma y yo de otro pueblo de Soria. Soy muy futbolero desde siempre. De chiquitín no había en Soria una referencia como puede ser el Valladolid en esta provincia o la Real Sociedad en Gipuzkoa. Las referencias futbolísticas en mi época, nací en el 78, eran las típicas: Real Madrid y Barcelona, pero asomaba la Real y el Athletic. Yo me hice de la Real. Empezabas a ver el fútbol y cómo a la selección acudían jugadores como Arconada, Larrañaga, Gorriz, López Ufarte... y nos 'engancharon'. Con la edad que tenía mi hija Sofía es cuando te enganchas al fútbol, y a nosotros nos enganchó muy fuerte la Real".
"En verano los pueblos se llenaban de gente que venían de otras ciudades de España, y venían muchos vecinos del País Vasco que traían cromos, bandejas del campeonato de Liga, banderines, camisetas de entrenar, etc. La primera camiseta que me pude comprar fue de Kodro. Yo le transmití eso a mi hija, con la suerte enorme de que ella tuvo la suerte de vivir otra época dorada de la Real en su infancia empezando con las chicas, con aquella Copa que ganaron en Granada en 2019. A partir de ahí ha vivido esos años con mucha intensidad de lo que es el sentimiento txuri urdin".
"Cuando ella fallece es durísimo, y enseguida cuando lo comunicas al entorno recibes muchas muestras de cariño. En lo que concierne al fútbol rápidamente llegaron muestras de cariño de su entorno, sobre todo del Club Deportivo Parquesol que es donde ella jugaba, un club de referencia de cantera y de fútbol base en la provincia de Valladolid. Sofía era una súper deportista, le apasasionaba cualquier deporte, pero se cruzó el fútbol en su vida. Una vez que entró en el Parquesol ya no había vuelta atrás. Nos pidieron colgar lo sucedido en sus redes sociales, y a partir de ahí ha sido un no parar. Además Sofía y yo formamos parte de una peña de Gipuzkoa, la Z7 Taldea que es una peña que apoya al equipo femenino de la Real, y ellos también lo movieron por redes y empezaron a llegar un montón de mensajes del entorno de la Real".
"Nosotros entendemos que el dolor que sentimos unido al fútbol puede ayudar a dar visibilidad a algo tan cruel y tan injusto como puede ser la muerte de un niño o una niña, en este caso por una leucemia. Si podemos dar visibilidad a esto y que de algún modo la sociedad pueda ver lo cruel que todavía son estas enfermedades en un entorno sano, familiar, deportista... Queremos concienciar de que todavía hay mucho por hacer, por investigar, y el fútbol nos brinda esta pequeña oportunidad y no queremos dejar que pase".
"A Sofía le dolió mucho cuando descendió el Real Valladolid porque estábamos en el campo, y ella pensaba en que no íbamos a recibir a la Real hasta que el Valladolid no voliera a Primera. Para nosotros un día como el del sábado estaba marcado en el calendario con ilusión total en la familia. Recibíamos a la gente de la Real, les enseñábamos lo bonito de la ciudad, los pinchos; las niñas estaban súper ilusionadas. Para nosotros era un día precioso, y que se haya acordado gente no sé si reconforta, pero nos llega el cariño. Es también lo grande del deporte y en este caso del fútbol".
¿Con qué recuerdo te quedas por ejemplo de estar con Sofía en un campo de fútbol?
"Fuimos a una semifinal de Supercopa femenina en Salamanca, en el Helmántico, entre la Real Sociedad y el Levante. Sofía estuvo tirando unos penaltis en el descanso de aquel partido. Ahí conocimos a la gente del Z7 Taledea. Fue un momento muy bonito. Después estuvimos con Gonzalo Arconada, que era el entrenador, y conoció a Nahikari García, a Quiñones... y fue muy bonito".
"Otro que recuerdo muy bonito fue la pasada temporada cuando fuimos a ver a la Real a Anoeta contra el Benfica, un partidazo. Mi niña se quedó prendada de Barrenetxea que hizo un partidazo, aunque a ella, por la posición en la que jugaba en el Parquesol le gustaba Le Normand. También Kubo y Oyarzabal. También le recuerdo ganar el 'Torneo Ciudad de Soria alevín' que para ella fue muy especial. Recuerdo verla lanzar un penalti en la final contra el Atlético de Madrid, marcar, ganar aquella final. Fue muy bonito".
"La hermana pequeña de Sofía tiene las cosas más claras, pero Sofía era todo ilusión, una soñadora. Estábamos muy ligados a Soria y a nuestro pueblo. Ella descansa en El Burgo de Osma, está enterrada allí, y este verano nos planteó tanto a mi mujer como a mí por separado que se quería ir a vivir a El Burgo de Osma. Ya tenía todo planeado porque allí estaba cerca de sus abuelos, estaba cerca del campo, de la naturaleza... y además el pasado mes de mayo habíamos ido a un torneo a Soria que organizaba el Club Deportivo CalaSanz, y ella se fijó que había banderas de la Real y me preguntó porqué. Yo le dije que era porque estaban convenidos con la Real y le expliqué lo que era eso, entonces este verano nos dijo de ir a vivir allí porque así podía entrenar con el Calasanz y sería más fácil llegar a la Real Sociedad. Tenía muy clara marcada la ruta. Por eso decidimos que ya que no iba a poder ir a vivir a El Burgo de Osma y vivir ese sueño, al menos poder descansar allí. Quién sabe si de alguna manera está empujando la pelota también".
"No tenemos la fuerza suficiente como para hacer de anfitriones, pero va a ser algo muy íntimo y bonito. El sábado el Real Valladolid nos ha contactado para hacer un homenaje a Sofía en su asiento de abonada, y sacaremos unas flores. Vamos a ir a su asiento a poner unas flores con una camiseta del Club Deportivo Parquesol con el 4 que llevaba la espalda, y veremos el partido en el palco. Nos ha invitado muy amablemente el Valladolid. Estará mi mujer, la niña pequeña, y yo. Probablemente también mi padre".
"Después por la tarde el mismo sábado a las 18 horas nos han invitado a los campos de Fútbol José Luis Saso en Valladolid,cerca del José Zorrilla, que es el campo de fútbol donde jugaba Sofía con el Parquesol. Empieza la liga infantil el sábado por la tarde y le van a hacer también un sentido homenaje a la niña y queremos estar presentes".
"Es increíble. Les hemos conocido a través del fútbol y se han volcado. Son gente que parece que llevaran toda la vida con nosotros. Nos han dicho que quieren hacer algo en lo que ellos llaman 'su casa', que es Zubieta con las chicas de la Real, las neskask. No sé todavía muy bien lo que es, pero vamos a estar en lo que sea porque los sentimos muy cercanos. Sé que algunos miembros van a estar en Valladolid, Rosa por ejemplo, 'Rous', que era muy muy muy especial para Sofía, y Sofía para ella también o Iñigo, que nos acogió también en el primer partido de LaLiga en Anoeta viendo el Rayo Vallecano. Sólo el hecho de que estén ya es un homenaje para nosotros por dedicar tiempo a la memoria de Sofía. Ella era muy tímida con ellos, pero hasta decía que cuando jugase en la Real les iba a dedicar goles en el córner".
"Recuerdo que antes de la éoca del Covid su camiseta se la firmaron todas las jugadoras en Salamanca. Lucía Rodríguez, que ha vueto a la Real y es lateral derecho, se llevó a la niña y dijo: 'ven, que te voy a presentar a las guays', que en aquella época eran Quiñones, Nahikari García o Nerea Eizagirre que ya despuntaba. A Nerea ya no la ha soltado. La ha seguido mucho, pero últimamente estaba súper enganchada de las dos centrales, Manu Banegas y Ana Tejada, en las que se fijaba por la posición del campo. Las chicas son muy muy cercanas. Ana dejó la Real y Sofía no lo entendía. Me preguntaba, "¿cómo es posible que haya gente que se vaya de la Real? ¡Si ya no hay nada más! ¿Cómo te puedes ir y no estar en la Real?".
Como padre no me quiero imaginar lo que es perder una hija a los 12 años... Mucho ánimo a la familia y amigos. Y ella, pobrecita mía, que descanse en paz.
Que pena, la vida va y viene pero no se detiene. Aupa Sofía