¿Quién es, realmente, Isaac Becerra Alguacil?

Tener un buen portero en Segunda División es vital. El Real Valladolid lo sabe. Su experiencia en las tres últimas temporadas de plata así lo demuestra. Jaime Jiménez, gracias a su trofeo Zamora, fue vital en el ascenso de 2012. Más recientemente, Javi Varas fue determinante para que el equipo de Joan Francesc Ferrer 'Rubi' llegara al play-off de ascenso de 2015 que se perdió ante la Unión Deportiva Las Palmas de Paco Herrera. Más actual aún, Kepa Arrizabalaga ha sido decisivo en los últimos meses para que el Pucela 2015/206 no descendiera de categoría.

 
Esa evolución en buenos porteros cumplirá la temporada 2016/2017 un nuevo capítulo. El mejor de la categoría, el último Zamora, será el encargado de defender la portería blanquivioleta para las tres próximas temporadas. Isaac Becerra, de 28 años, llegará a la treintena vestido de blanquivioleta y en lo que debe ser su confirmación profesional. Reconocido y valorado por sus tres últimas temporadas en el Girona FC, donde ha rozado un histórico ascenso en dos ocasiones y donde solo ha recibido 63 goles en los últimos 84 partidos de liga regular. Con los datos y las grandes sensaciones que ha dejado en la categoría, Paco Herrera y Braulio Vázquez apuestan por un portero de garantías y relevancia.

Breve experiencia en el extranjero

La realidad del nuevo portero del Real Valladolid pasa por las canteras del RCD Espanyol y Real Madrid. Formado íntegramente en la casa perica, Isaac creció para intentar llegar lo más alto posible, pero nunca debutó en competición oficial con el conjunto blanquiazul. Convocado en varias ocasiones con el primer equipo, para diferentes partidos y diversas concentraciones, el futbolista natural de Santa Coloma de Gramanet cerró su etapa en el club de su vida en 2009. Con 21 años aceptó una propuesta que le llegó desde Grecia para dar un salto en su carrera.
Atraído por un club de la élite helena como el Panionios, el jugador hizo las maletas. Las hizo para disfrutar de cuatro partidos en el equipo griego. Debutando tras la lesión del portero titular, el catalán vivió la experiencia del extranjero de una forma breve. Tras ella, le llamó el Real Madrid. El club merengue veía en su potencial un gran activo para luchar por regresar a la categoría de plata con el Castilla. Ensombrecido por la figura de Jesús Fernández, el nuevo blanquivioleta solo disputó tres partidos en dos temporadas en la casa blanca.
Estos tres encuentros fueron firmados en la 2011/2012 o, lo que es lo mismo, la campaña en la que el filial de Real Madrid consiguió el ascenso soñado a Segunda. Con una generación de nombres tan relevantes como Jesé Rodríguez, Álvaro Morata, Dani Carvajal, Nacho Fernández o Denis Cheryshev, Becerra puso el punto y final a su etapa en Madrid. Comenzaba su llegada al estrellato.

Intrascendente con Rubi

Ningún inicio es sencillo y pese a que el portero ha sido titular indiscutible en las últimas tres temporadas en Montilivi, el comienzo fue duro. De la mano de Rubi, el equipo llegó, como hace pocas semanas, a la final del play-off de ascenso. Este hito para el club catalán no tuvo al cancerbero de protagonista. En aquella exitosa temporada, Dani Mallo generaba la confianza en el que, tiempo después, fue entrenador pucelano.
Pese a que Rubi confió en el veterano portero hasta darle 39 titularidades ligueras, el nuevo meta blanquivioleta disputó el play-off de ascenso íntegro. Partícipe de la victoria sobre la AD Alcorcón, el cancerbero elegido por Paco Herrera vivió la derrota ante la UD Almería. La temporada decía adiós a solo un paso de Primera pero con el 'fichaje' de un portero que durante las tres temporadas después solo se perdió, y por lesión, un encuentro.

Confirmación total

Aquella primera campaña en Montilivi no fue sencilla. Le costó entrar en el equipo pero terminó viviendo el amargo sabor del no ascenso desde el terreno de juego. Esa sensación no es nueva para él. Tres experiencias de play-off, con 10 partidos disputados, han hecho del nuevo fichaje del Real Valladolid un seguro en la categoría. Ahora, en su nueva etapa, el jugador no ha tenido dudas en llegar al Nuevo Estadio José Zorrilla como tampoco las ha tenido el club en su fichaje.
El Real Valladolid se hace con un portero de garantías, experiencia y futuro. Un cóctel completo para seguir dando forma a un equipo que se está construyendo con cuidado y mimo pero que ya ha dejado sus tres primeras piezas bien formadas. A la base y seguro de un conocedor de la categoría se han sumado un central de garantías y un portero de envidia para el proyecto. Además, todo ello se forma con lo que el entorno pedía: vinculación más allá del siguiente verano y, por el momento, catalán y cántabro han firmado hasta 2019.