Primera toma de contacto de Paco Herrera

Se dice que cada entrenador posee su metodología. Paco Herrera tiene la suya y en la primera sesión de entrenamiento de su Real Valladolid ha querido cumplir con el patrón de avanzar de forma constante y progresiva. Con esta idea, la sesión ha transcurrido por el guión de una toma de contacto entre el nuevo cuerpo técnico y una plantilla de 23 jugadores con muchas caras nuevas y solo cinco conocidas de la temporada, dejando a un lado los ocho canteranos citados para este inicio de preparación a los que se sumaba Renzo Zambrano.

 

Larga semana

Esta primera sesión de una larga semana de diez entrenamientos no ha tenido mucha complejidad. Carrera de calentamiento y rondos coparon los primeros minutos de la nueva temporada. Tras el calentamiento llegaba el momento del primer trabajo del nuevo proyecto. División de la plantilla en dos grupos en los que no entraba Isaac Becerra, que realizaba trabajo específico con José Manuel Santisteban. Si por un lado trabajaban Samuel Llorca, Guzmán Casaseca, Javi Moyano, Víctor Pérez, Dani Hernández, Renzo Zambrano, Caye Quintana, Mario Gómez, Anuar Tuhami, Juan Villar, Jose Arnáiz y Ángel García, por el otro lo hacían André Leão, Markel Etxeberria, Óscar Arroyo, Fernando Calero, Luismi Sánchez, Jaime Mata, Toni Villa, Enzo Rennella, Alberto Guitián y Pau Torres. Tal división provocaba la primera interacción de Paco Herrera con su plantilla. El catalán, muy incisivo en todo el entrenamiento, no dejaba de corregir a sus jugadores. En tal actividad también participaba Fran Albert, nuevo preparador físico del equipo.
El gen dialogante del nuevo míster del Real Valladolid se pudo ver durante toda la sesión. Los canteranos fueron los primeros pero nadie se libró de las palabras del entrenador. Los porteros, incluído Dani Hernández, tuvieron un largo diálogo con el ex de la UD Las Palmas.

Circuito físico

Tras la intensidad de los primeros ejercicios, llegó la base de la primera sesión. Un circuito físico bajo el liderazgo del nuevo cuerpo técnico marcó la primera toma de contacto del nuevo Real Valladolid. Una propuesta en la que la comunicación es vital. El ejemplo de que Paco Herrera fuera hablando uno a uno con todos los grupos de trabajo demuestra que el Pucela tiene una idea clara y que, en ésta, la armonía y la buena conexión es fundamental. De los errores se aprende y, tras lo sucedido la temporada pasada, el club sabe que el catalán es lo que necesita el Pucela 2016/2017.

Charlas finales

La actividad en este primer entrenamiento fue alta. Tanta que tras llegar a su final, ésta continuó en forma de charla. Mientras Paco Herrera dialogaba con Víctor Pérez, Braulio Vázquez lo hacía con Juan Villar. Mientras el preparador hablaba con uno de los jugadores que parece tener las horas contadas en la ciudad del Pisuerga, el Director Deportivo lo hacía con uno de los jugadores de mayor caché del proyecto pero que , hasta la fecha, no ha recibido esas grandes ofertas que parecía que iba a recibir.