Finalmente, Borja dice adiós al Real Valladolid

Ya lo decía Carlos Suárez ayer en su rueda de prensa: "El club está viviendo un cambio generacional", aseguraba. El máximo accionista lo tenía claro, ya que Braulio Vázquez lo está ejecutando en el centro del campo. El gallego ha firmado un perfil de futbolistas jóvenes para terminar con la etapa de otros. Con Álvaro Rubio en la puerta de salida, Borja Fernández ya es historia del club blanquivioleta. El centrocampista gallego, que regresó a Pucela en el pasado mercado invernal, cierra, nuevamente, una etapa tras romper sus propias estadísticas pero ayudar para que el Pucela 2015/2016 no terminara con sus huesos en Segunda División B.

 

Sucesión de hechos

La salida de Borja, que "ha decidido desvincularse de su Pucela sin recibir ninguna contraprestación", como afirma el Real Valladolid en su web oficial, no ha sido fácil. El pasado 15 de mayo, bajo sorpresa, el gallego reconoció que le quedaba un año más de contrato. Horas después se supo que había una opción de que los minutos disputados en estos seis meses le hicieran renovar su vinculación. Pese a que a los lectores de ElDesmarque Valladolid no les contentaba tal opción, el '6' tenía un hueco en la plantilla. Lo tuvo hasta la llegada de Paco Herrera. 
El nuevo entrenador del Real Valladolid no contaba con el jugador y éste, tras un tiempo de reflexión, ha hecho las maletas. Regresa a la India en su tercera etapa. Lo hace por la puerta grande. Además de por ayudar al Pucela para cumplir el objetivo que "desgraciadamente tocaba", como él mismo confesó en Instagram, lo hace perdonando al club el montante económico firmado, algo que la entidad ha querido destacar en su comunicado.
Borja Fernández se marcha del Pucela, el club de su vida, del que, otra vez, ha querido despedirse de manera especial a través de las redes sociales: