La resaca de Elche, a puerta cerrada

Tras perder en el Estadio Manuel Martínez Valero de Elche, el Real Valladolid comenzaba una nueva semana con una sesión que valía, como siempre, para relajar piernas en los jugadores con más minutos en el último partido y activar a aquellos sin actividad en el duelo ante los de Alberto Toril. Con la gran ausencia de Juan Villar, sustituido en Elche por "unas molestias en el aductor", como afirmaba Paco Herrera en la rueda de prensa, el equipo dirigido por el entrenador pacense comenzaba la semana con la realización del entrenamiento 100 de la temporada, en el que tampoco participaban ni Javi Moyano ni Jose Arnáiz, como aseguraba el Club pucelano.

 
Con la vista ya puesta en el duelo ante el CD Numancia del próximo sábado y con el lunes como día de descanso, la sesión discurría a puerta cerrada. Por sorpresa y lejos de lo planificado en un inicio, el técnico decidía adelantarla media hora y cambiarla de escenario y formato para no centrar la atención en el primer equipo en unos Anexos en los que disputaba su encuentro el Real Valladolid Promesas ante el CD Izarra. De los campos de entrenamiento se trasladaba al Nuevo Estadio José Zorrilla y de puerta abierta, a cerrada. Modificación de última hora para pasar la resaca de la derrota en Elche en la sesión 100 de la temporada.