El pasado 7 de septiembre, Sergio Marcos ilusionaba al entorno blanquivioleta. En su primer partido como titular desde su llegada al Real Valladolid, el alcarreño conseguía realizar un gran encuentro copero en la victoria (1-2) ante el Real Zaragoza. La esperanza no llegaba sólo con el partido del '10' sino con la comparecencia de Paco Herrera en la sala de prensa del Estadio de La Romareda. El ya extrenador pucelano se deshacía en elogios sobre el ex del Club Deportivo Lugo. Con esas palabras, la esperanza sobre la pierna izquierda y la calidad de Sergio Marcos era altísima. Ahora, cerrada la temporada, muchos se preguntan hasta dónde puede llegar un jugador al que le quedan dos años de contrato con la entidad blanquivioleta.
Las dudas llegan por el poco peso que ha tenido en la temporada. Es cierto que se le han visto maneras y estilo con el balón pero los pocos minutos acumulados generan miedo. Ha participado en 26 partidos, pero tan cierto como ello es que en sólo ocho ha sido titular y sólo cuatro de ellos han sido completos. Uno de los jugadores más utilizados en la Copa del Rey deja datos ligueros muy pobres. No fue titular en LaLiga 1|2|3 hasta la jornada 26 cuando el Real Valladolid se impuso (1-3) al UCAM Murcia. De igual forma, sólo ha completado un encuentro liguero. La reciente victoria (1-0) ante el Cádiz CF ha sido el único duelo del '10' disputó íntegro y a nivel liguero.
Con ello, y pese a los 26 partidos jugados, las cifras de juego de Sergio Marcos sobrepasan por poco los 900 minutos. No llega a los 1.000 en total y apenas supera los 500 a nivel liguero. Con ello, el '10' cierra su primera temporada en Valladolid como una incógnita. Una opción a la que se la visto calidad, sobre la que se ha hablado muy bien, pero que no ha demostrado grandes cualidades porque, entre otras opciones, no ha disfrutado de grandes oportunidades ni de la regularidad necesaria.
Las temporadas en el fútbol, por largas que sean, se definen por detalles y la de Sergio Marcos puede estar marcada por el lastre con el que llegó al Real Valladolid. En su último partido con el Lugo, ante la Sociedad Deportiva Huesca, el alcarreño fue expulsado y llegó al Nuevo Estadio José Zorrilla con dos partidos de suspensión. En los dos primeros partidos ligueros, aquéllos en los que Joan Jordán estaba lesionado y Míchel Herrero aún en rodaje, Paco Herrera tuvo que llamar a Renzo Zambrano. Esas primeras oportunidades pudieron ser para un Sergio Marcos que, sancionado, comenzaba su andadura en el banquillo, lugar donde ha vivido la mayor parte de la temporada.