Incontestable relevancia

No ha sido una temporada fácil. En absoluto. Pese a todos los condicionantes que ha tenido este proyecto y que han hecho algo, por mínimo que sea, positivo el paso de Paco Herrera por el Nuevo Estadio José Zorrilla, ni el jugador con más minutos y más peso de la plantilla se ha salvado de las críticas, los bajones físicos, las dudas del entorno y las propias por abandonar el Real Valladolid. Javi Moyano, capitán del equipo, lateral derecho incontestable y el jugador con más minutos de la temporada, ha sufrido muchas heridas durante la pasada temporada. Tantas y con tan difícil cura que el '17' ha pedido salir del Club, como ha adelantado ElDesmarque Valladolid.

 
Tras 41 partidos ligueros disputados, ya que sólo se perdió la derrota (0-4) ante el Levante UD, y 3.654 minutos, Javi Moyano adquiría esta temporada un peso importante en el proyecto de Paco Herrera. Desde el principio y hasta el final de la temporada, y pese a las malas semanas que el propio jugador confesaba en sala de prensa, el entrenador pacense nunca dudó del peso que tenía y debía tener el ex del Club Deportivo Tenerife. Siempre ha sido un jugador relevante en los esquemas pucelanos hasta el punto de que nunca dejó oportunidad a un Markel Etxeberria que tuvo que darse por contento con su amplia participación copera y la mencionada titular en la dolorosa goleada ante el equipo de Juan Ramón López Muñiz.
Con esos 41 partidos, la importancia del futbolista crecía jornada a jornada. Tras una temporada pasada en la que el jienense peleó el puesto con Javi Chica, esta campaña llegó a ser indiscutible y firmar unos datos elevados para el equipo pero, también, para LaLiga 1|2|3. Todo parecía estar en favor de un jugador que tuvo que ser el portavoz de una temporada complicada. 

Una voz autorizada

Ese peso en el campo y esa importancia para el cuerpo técnico tenía un peaje, un liderazgo que había que demostrar sobre la sala de prensa de Zorrilla y tras muchos de los partidos disputados fuera de Valladolid. Así, a Javi Moyano le tocó resumir la temporada el día que el equipo se despedía tras el último encuentro liguero pero, también, le tocó dar la cara tras la dolorosa derrota ante el Sevilla Atlético. Era una voz autorizada y exigida cuando al equipo no le iba como se esperaba. Obligado a comparar entre esta temporada y la pasada, Moyano pedía ser fiables en casa y tener una imponente personalidad. Estaba exigido a toda esa presión. Parecía irle en el puesto.
Ser el capitán y, a su vez, un líder con un incontestable peso en el equipo, ha añadido presión a la segunda temporada del '17' en Valladolid. Con ella y sus números, renovaba automáticamente el mes de enero pero, igualmente, añadía una exigencia y un peso del que Moyano quiere salir en la actualidad.