Constancia premiada

Fue uno de los primeros en despedirse. Tras ser uno de los jugadores más importantes y más utilizados por Paco Herrera, Luciano Balbi se despedía desde su cuenta de Instagram de la temporada que había vivido en el Real Valladolid. Lo hacía tras 41 partidos, 40 de ellos ligueros, y después de 3.442 minutos de juego. El segundo jugador más utilizado a nivel liguero, sólo por detrás de Javi Moyano, abandonaba el Nuevo Estadio José Zorrilla enfadado por no haber conseguido el objetivo pero satisfecho tras ver el nivel al que ha sido capaz de llegar en su primera temporada en Europa.

 
La constancia de su juego, la fiabilidad de sus movimientos y la seguridad que ejercía en el carril del '3' no han pasado desapercibidos para muchos equipos. Durante estos últimos 10 meses han sido varios los conjuntos que lo han apuntado en su agenda. El peso adquirido en un proyecto como éste, aunque en la primera jornada no pudo ser convocado por arrastrar una sanción de su etapa en el Club Atlético Huracán, le hará ser noticia este verano. Muchos llamarán a su puerta por esa fiabilidad en el juego defensivo que le ha valido para ser indiscutible en los esquemas pucelanos y dejar sin casi oportunidades a Ángel García.
Balbi, además de firmar un gran rendimiento esta temporada, ha roto muchas de las esperanzas del proyecto pucelano. Hace un año, Braulio Vázquez diseñaba su tercer Real Valladolid con Ángel García en un puesto capital. El '3' tenía ficha del primer equipo y, sobre el papel, se le asignaban muchas opciones de ser el lateral izquierdo titular. Durante la anterior temporada, siempre que había competido en dicha posición había rendido pero en esta ocasión, Luciano Balbi acapararía todos los minutos. O casi todos. El argentino ha disputado 40 partidos. Ha sido titular en todos ellos, completando 34. Además, ha disputado el 90,9% de los minutos. En definitiva, los datos de un jugador relevante, importante e imprescindible.

El gol de Anduva

Las temporada se definen por detalles y, también, por imágenes. Si la campaña de Sergio Marcos se pudo resumir por esa sanción con la que llegó a Valladolid, el paso de Luciano Balbi por Valladolid estará siempre definido por el tanto del empate (2-2) del Club Deportivo Mirandés en el Estadio de Anduva. El fallo de Isaac Becerra que tanto enfadó a Paco Herrera y que alejó al Real Valladolid de la zona de play off deja marcada la etapa de Balbi por Valladolid y, quién sabe, si por España. Pese a dicha estampa, el futbolista deja un poso de más de 3.000 minutos y de una constancia en su juego que se terminó premiando con un estatus importante.