En la derrota (1-2) ante el Fútbol Club Barcelona B las sensaciones no fueron del todo malas. El equipo empujó. Tuvo fuerza y llegó a "estusiasmar" a Luis César Sampedro. La segunda parte fue blanquivioleta y los pucelanos consiguieron vivir en el área culé. Tuvieron ideas pero carecieron de ejecución. Con Jose Arnáiz o sin él, está claro que el Real Valladolid necesita refuerzos. Los exigía antes del estreno y los solicitar tras él. Son necesarios para la zona ofensiva. Independientemente de la llegada de Asier Villalibre, Miguel Ángel Gómez quería dotar al equipo de alternativas ofensivas y éstas llegan con el griego Giannis Gianniotas (Neochori - Grecia -, 29/04/1993).
Este extremo, que es cedido desde el Olympiacos FC, llega al Nuevo Estadio José Zorrilla tras dos grandes participaciones en el APOEL Nicosia de Chipre. Con una buena participación en Europa League, llegando a anotar dos goles al Athletic Club la pasada campaña, este extremo diestro de gran profundidad y fuerza genera alternativas al ataque blanquivioleta y aporta un nuevo "velocista" a la idea de juego que Luis César Sampedro remarcaba en la última comparecencia de prensa.
El duodécimo fichaje del Real Valladolid 2017/2018 tiene su base en el Aris de Salónica. Pese a tener pasado, mucho más reciente, en el Asteras Tripolis FC, la formación de Gianniotas comenzaba en Salónica, a casi 250 kilómetros de su casa. Uno de los equipos helenos que más peso español ha tenido en su historia fue la cuna del nuevo blanquivioleta. Se formó en él y con ellos debutaría en 2011 en la máxima competición helena. Crecería de la mano del equipo amarillo y, junto a ellos, llegaría al máximo nivel. Cumplía sus sueños, aquéllos que al poco de llegar al mundo profesional le llevaron a cambiar de país.
Año y medio después de ese debut del 5 de noviembre de 2011, Giannis Gianniotas cambia Grecia por Alemania y la máxima competición helena por la segunda germana. Una pequeña evolución en su ambición que salió cruz. Con menos de 1.000 minutos en las filas del Fortuna Düsseldorf en la campaña 2013/2014, el extremo regresaba a casa y tomaba el camino que cambiaría su carrera. La llegada al Asteras Tripolis cambió el ámbito futbolístico y su vida. Su regreso a Grecia y el rendimiento ofrecido le abrieron las puertas de la selección absoluta y su fichaje por el Olympiacos FC.
Antes de firmar por el gigante heleno en junio de 2015, Gianniotas acumuló más de 2.300 minutos en el Asteras, equipo con el que marcó seis goles y proporcionó tres asistencias. Una explosión que le llevó, a su vez, a ser convocado por el combinado absoluto de su país en marzo de 2015. Con todo ello, y con apenas 22 años, el Olympiacos apostó por él. Con un desembolso superior al medio millón de euros, el nuevo jugador blanquivioleta llegaba al Estadio Georgios Karaiskakis con un contrato de cuatro temporadas.
El próximo 30 de junio, cuando termine la vinculación de Gianniotas con el Real Valladolid, el extremo sólo habrá vivido seis meses como jugador de El Pireo. Las pocas oportunidades en los primeros meses en el Olympiacos obligaron al jugador a buscar una salida. Esa opción llegaría de Chipre y del APOEL Nicosia, concretamente. Cinco goles en 17 partidos fueron un buen bagaje para que el equipo chipriota solicitar una nueva cesión hace algo más de un año. El vallisoletano Juanjo Lorenzo quería al jugador y éste no rechazaría una inmejorable oportunidad de seguir demostrando su potencial, aquél en el que ahora se han fijado Miguel Ángel Gómez y su equipo de trabajo.
Si la primera experiencia en Chipre fue buena; la segunda, mejor. Marcado por el doblete en la eliminatoria ante el Athletic Club, Giannis Gianniotas firmó el pasado año 43 partidos y más de 2.500 minutos. Participando en la previa de la Champions League y en la Europa Legaue, el duodécimo fichaje del nuevo Real Valladolid firmaba, antes de llegar al Nuevo Estadio José Zorrilla, ocho goles y siete asistencias, un bagaje muy positivo para dar el salto a España y hacer de la banda derecha su lugar en Valladolid y d su velocidad y descaro su mayor aval para Luis César Sampedro.