La sala de máquinas del barco blanquivioleta cuenta con varios capitanes al mando. Luis César Sampedro, encargado de dirigirla desde fuera, necesita una buena prolongación sobre el césped. En el fútbol, el juego pasa siempre por el centro del campo y en el Real Valladolid no iba a ser menos. Muchos son los centrocampistas con los que cuenta el proyecto vallisoletano en este 2017/2018 pero se cuentan con una mano los que tienen que llevar la manija, el tempo, el balón desde la defensa a la delantera. Esos cinco nombres, con variantes en su nivel de participación hasta la fecha son: Luismi Sánchez, Borja Fernández, Anuar Tuhami, Antonio Cotán y Sulayman Marreh.
Segunda temporada a orillas del Pisuerga y primera en la que está teniendo importancia capital. Aunque ya sabe lo que es jugar en Primera División, lo hizo con el Sevilla FC, su carrera la ha forjado entre Segunda División B y LaLiga 1|2|3. Grandes números en el filial de Nervión, jugándolo todo en la temporada 2014/2015. El pasado curso, sin sitio en el pucela, probaba suerte en el Club Gimnàstic de Tarragona. Segunda vuelta inmaculada por tierras catalanas siendo un pilar básico en la permanencia de los tarraconenses. Más de 1.000 minutos repartidos en 14 partidos.
Este curso cuenta con el apoyo del entrenador. Es el jefe del centro del campo y cuando puede se suma al ataque. Combina disciplina táctica con buen toque de balón. Es intenso, cuatro cartulinas amarillas y una roja (estando en el banquillo) en los 11 encuentros que ha disputado hasta el momento, nueve como titular. Casi 800 minutos sobre el césped en los que ha repartido mucho juego cayendo a banda, bajando a recibir y hasta marcado incluso un gol. Con él, el Pucela gana más que pierde, cinco por cuatro.
Tercer ciclo en Valladolid. Uno más de la familia blanquivioleta. Forjado en la cantera del Real Madrid, el centrocampista gallego suma a sus 36 años, más de 300 partidos en la élite. En el Pucela ha jugado tanto en Primera como en Segunda División, superando ya los 150.
En esta última etapa con la zamarra pucelana, el ‘8’ ha participado en 11 partidos de Liga. Su rol en el equipo es muy importante ya que con su experiencia, puede solventar mejor las situaciones adversas dentro de la tensión de un partido. Va bien al choque y por alto es un seguro. Para ver al Borja que la parroquia pucelana espera, la dosificación de minutos debe ser clave. 945 en su contador particular, jugando los 90 en todos menos en uno. Con Borja, también se gana más que se pierde, cinco victorias por tres derrotas.
Canterano de los pies a la cabeza. Con muy pocas oportunidades, necesita un año como el que se le puede presentar. Partidos de suspensión, lesiones, rotaciones… Algo más que las rondas previas de la Copa del Rey. Talento puro a la hora de sacar el balón jugado. En conducción, tres cuartas partes de lo mismo. Ocho partidos, entre Liga y Copa, son los disputados por el ceutí de 22 años en esta campaña, cuatro de ellos completos. Con Anuar en el campo, el Real Valladolid solamente ha perdido uno, el último frente al Nàstic. Asociarse es su fuerte y eso lo debe aprovechar el Pucela.
Otro de la cantera sevillista. Recién llegado en el mercado estival, busca convertirse en un futbolista total. Al igual que Luismi, ya ha debutado en la máxima categoría del fútbol español con el Sevilla. Con más de 100 partidos con la elástica del filial hispalense, siendo uno de los pilares fundamentales del mismo el año pasado, el reto de triunfar en el Real Valladolid es otro plato fuerte.
Hasta el momento ha jugado poco pero con él en el campo, también se gana más que se pierde. En los siete partidos que ha disputado en total, cuatro de Liga y tres de Copa, el Real Valladolid ha ganado cinco y ha perdido dos. En la competición de la regularidad comenzaba el campeonato como titular los dos primeros duelos pero desaparecía acto seguido para volver a disputar tan sólo 15 minutos contra el Córdoba CF y 14 frente a la AD Alcorcón. Cotán tiene desparpajo, juventud, fuerza y llegada en segunda línea. Puede ayudar mucho en la salida del balón pero sobre todo en zona de tres cuartos de ataque. Sampedro tiene un diamante por pulir.
Con 18 años debutaba en Primera División con el Granada CF. Hasta el momento, poco se le ha visto por el Nuevo Estadio José Zorrilla. Poco en cuanto a minutos, 270 minutos repartidos en los tres partidos de Copa del Rey, pero el Real Valladolid tiene a un joven cumplidor, potente, que llega muy bien al corte y con posibilidades de sacar el balón desde abajo. Esto último es tan cierto que el gambiano ha jugado todos sus minutos de central. No estará en Gijón por su convocatoria con Gambia, ideal para que se ruede.
Pentágono imperfecto que con trabajo puede volverse perfecto. Tarea ardua y difícil la de Luis César pero perfectamente realizable. El tiempo dirá si la sala de máquinas blanquivioleta funciona a la perfección.