No es un rival sencillo y, ni mucho menos, un escenario propicio para puntuar. El Real Sporting de Gijón se está mostrando esta campaña imbatible frente a su gente y no conoce la derrota tras los seis encuentros disputados y que se han saldado con cuatro triunfos y dos empates. Sin embargo, el técnico del Real Valladolid sí sabe lo que es vencer en el fortín asturiano, y no de cualquier manera: Luis César Sampedro, cuando capitaneaba a un recién ascendido a la categoría de plata, el Club Gimnástic de Tarragona, consiguió hace años asaltar el estadio gijonés con un triunfo 0-3. El pontevedrés conoce la receta de la victoria y de la goleada.
Allá por el año 2005, el 11 de junio más concretamente, el Sporting y el Nástic se medían en la penúltima jornada del campeonato liguero con los deberes hechos y sin objetivos a esas alturas más allá del orgullo: ambos equipos en tierra de nadie, sin opciones de ascenso ni de descenso a Segunda División B y prácticamente con los mismos puntos en su casillero: 54 por parte de los asturianos y 56 para los catalanes. Los gijoneses, sin embargo, vivían un auténtico infierno: movilizaciones de los futbolistas contra sus propios directivos debido a impagos, numerosas bajas y, tras una decepcionante campaña, último partido frente a su público. El colofón no pudo ser peor.
El Nástic de Luis César prendió la mecha del Estadio de El Molinón merced al doblete del vallisoletano Diego Torres y al tanto de Jon Pérez, 'Bolo', que marcó el definitivo 0-3 e hizo estallar a la afición rojiblanca y que, de hecho, a punto estuvo de terminar con un póker de no ser por una buena acción de Rafa González bajo palos. Goleada para cerrar una temporada para olvidar de los rojiblancos y que, por contra, sirvió al pontevedrés y sus pupilos del conjunto grana para dar por finalizado un curso histórico: séptimos clasificados con 60 puntos como recién ascendidos y a tres puntos del sexto: el Real Valladolid, actual equipo del gallego y próximo rival del Sporting de Gijón, que reciben a un entrenador que sabe lo que es golearles en casa.