Jagoba Arrasate, al contrario que Luis César Sampedro, compareció eufórico en la sala de prensa del Estadio José Zorrilla tras la victoria de su equipo (2-3). El técnico fue sincero con la lectura que hizo al descanso del 2-0 en contra con el que afrontó el CD Numancia la segunda parte. "El Valladolid tiene la virtud de atacar muy bien y seguir atacando cuando va ganando, pero le cuesta cerrarse. Contra otro tipo de equipos, con 2-0, no hay nada que hacer y contra el Valladolid, al igual que puede golearte, te puedes meter en el partido".
El entrenador vasco reconoció que la superioridad numérica ayudó a la remontada: "El gol nos ha metido en el partido y la expulsión de Kiko Olivas ha sido decisiva. Nos llevamos tres puntos importantísimos". Y analizó así los 90 minutos: "Hemos empezado con miedo. El Valladolid tenía un buen juego posicional y había miedo de ir a la presión. En el descanso hemos hablado de que teníamos que llevar la presión más arriba, arriesgar, jugar en campo rival y meter un gol para que hubiese partido. Hemos creído que apretando más arriba podíamos hacer más daño. Los cambios nos han dado mucho".